'Izquierda y derecha', de Joseph Roth, ve la luz en Barataria
La novela retrata la soledad moderna y la descomposición de la Alemania de Weimar
Izquierda y derecha, obra de Joseph Roth (1894-1939), uno de los autores centrales de la literatura centroeuropea de entreguerras, ha sido rescatada por la editorial sevillana Barataria, con sede en La Puebla de Cazalla. La novela, la culminación de la que muchos consideran la primera etapa del escritor judío, propone, según declaraciones del sello a la agencia Europa Press, "una fotografía del poder y de los que lo ostentan" y también una "escalofriante" reflexión sobre la soledad del hombre moderno.
Con traducción de Sandra Chaparro Martínez y ambientada en un Berlín amargo y burlesco y repleto de vividores y falsos artistas, como si de un cabaret gigante se tratase, la obra vio la luz por primera vez en 1929. El autor de La leyenda del santo bebedor recrea el ambiente de la República de Weimar, el hundimiento de una sociedad que asiste impasible al ascenso del nazismo, y lo hace a través de las historias de la familia Bernheim, en la ruina económica y moral tras la Gran Guerra, como la propia Alemania; y de los hermanos Bernheim, en apariencia enemigos irreconciliables, aunque en realidad profundamente unidos por su identidad de clase.
Otro personaje, éste de naturaleza enigmática, aparece en la novela para controlar como marionetas a estos dos hermanos: se trata de Nikolai Brandeis, un apátrida de poderosa y solitaria inteligencia, "contrapunto -señalan desde la editorial- de la descomposición social" y los negocios dudosos que captura en sus páginas Izquierda y derecha.
Joseph Roth, nacido en Brody, principado de Galitzia-Volinia, por entonces en el Imperio Austrohúngaro y hoy Ucrania, perteneció a una familia judía acomodada, estudió Literatura y Filosofía en Viena, se alistó voluntario durante la Gran Guerra y desde 1923 viajó por toda Europa como corresponsal del Frankfurter Zeitung. Huyendo del nazismo, se exilió en París, donde enfermo y alcoholizado murió poco antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial. Escribió numeras obras en alemán, entre ellas, y aparte de las ya citadas, Hotel Savoy, La marcha Radetzky, El espejo ciego, Las ciudades blancas, Viaje a Rusia y Judíos errantes.
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