Wali, el considerado francotirador más mortífero, desmiente su muerte en combate

Alistado en las fuerzas ucranianas

El canadiense ha ofrecido una entrevista para hacer ver que no ha muerto y que se encuentra perfectamente: "ha sido propaganda rusa".

Comenta que los bombardeos rusos son constantes pero el armamento no es muy sofisticado

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Wali desmiente su muerte

Propaganda rusa y una paparrucha. Wali, el considerado como el francotirador más letal del mundo por su acción contra el ISIS y en diversas guerras del mundo está vivo y no ha muerto en combate. El canadiense ha aparecido en varios medios de comunicación canadienses y estadounidenses para desmentir que haya muerto "a los 20 minutos de entrar en combate" como así filtró Rusia en un ejercicio de desinformación.

El experto militar norteamericano, que se alistó en las fuerzas ucranianas contra la invasión rusa en Ucrania, afirma que fue "el último en enterarse de su propia muerte". Comenta además Wali que le impactó ver la cantidad de llamadas perdidas y mensajes en su móvil, para preguntarle si estaba vivo cuando llegó a casa. El militar suele dejar el dispositivo para no ser localizado por el Ejército ruso.

El soldado de Quebec de 40 años, cuyo nombre real se omite por protección, partió a principios de marzo para unirse a las fuerzas ucranianas en el frente. Explica que los rusos le dispararon durante tres días, pero que había regresado ileso de su primera misión cerca de Kiev. "Estaba en este increíble apartamento que no se diferencia mucho a uno de Toronto: con su máquina de café espresso y una buena televisión. Estaba parado en la cocina y vi la enorme bola de fuego. Y los cristales de las ventanas estallaron en mil pedazos por todas partes".

Armamento no muy sofisticado

Wali explica que las fuerzas rusas no le han parecido particularmente sofisticadas y, según su experiencia, recurren al bombardeo constante en lugar de tratar de rastrear o enfrentarse a las fuerzas enemigas.

"No deberíamos subestimarlos, pero no son tan buenos como el ejército de la OTAN. Le tendría mucho más miedo al equivalente de soldados canadienses con todos los aviones, tanques e infantería que al número equivalente de soldados rusos", expresa.

El bombardeo, sin embargo, es constante: "Es como, cientos y cientos y cientos de proyectiles sin parar mientras duermes, mientras comes, todo el tiempo".

Además de estar vivo, Wali cuestiona la idea de que él es el mejor francotirador del mundo y señala que, si bien es bueno, hay algunos francotiradores "increíbles" en Ucrania.

Wali comenta que aunque se encuentra intacto sospecha que tiene o covid-19 o un buen resfriado porque no está con las mismas fuerzas de siempre. En otro sentido reconoce no haber disparado ni matada a ningún ruso aún, aunque indica que trabaja para ayudar en los trabajos de localización y observación, dos cualidades muy presentes en los francotiradores.

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