Motos de agua: ¿Hace falta tener carnet de conducir para llevarlas?

Una de las mejores cosas del verano es poder disfrutar de una buena temporada de playa. Especialmente, cuando el sol se vuelve insostenible y viajar con vistas al mar, una solución de lo más atractiva. Entre la arena fina y el sabor a sal, se abre un amplio abanico de posibilidades de ocio y descanso, que incluyen un variado repertorio de actividades de agua.

Para los amantes del deporte y la aventura, este parece ser el momento perfecto de practicar surf, esquí acuático, buceo y hasta montar en una moto acuática, una de las opciones que, cada vez, resulta ser más demandada. Sin embargo, a su alrededor, las preguntas se suceden unas a otras: ¿es necesario un permiso especial para conducirlas?, ¿y si la alquilamos en una playa o es de un amigo?, ¿es imprescindible contratar algún tipo de seguro?

Aumentan las matriculaciones de motos de agua

A través de un comunicado, AMW, la empresa líder en la comercialización online de seguros de motos, afirma que “las matriculaciones de motos de agua aumentaron un 50% en 2023 con respecto al año anterior”. Se trata de un dato muy elocuente, que refleja el creciente interés por este tipo de embarcaciones ligeras.

Según el Real Decreto 875/2014, de 10 de octubre, por el que se regulan las titulaciones náuticas para el gobierno de las embarcaciones de recreo, una moto náutica es un “artefacto flotante, de menos de 4 metros de eslora, que utiliza un motor de combustión interna con una bomba de chorro de agua como medio principal de propulsión, proyectada para ser manejada por una o más personas sentadas, de pie o de rodillas sobre los límites de un casco y no dentro de ellos”. (artículo 3.4)

Asimismo, añade AMW, “estas pueden ser de recreo o de uso deportivo. Y se ofrecen en configuración monoplaza, también denominadas jet ski, o para varios ocupantes, conocidas como run about”.

¿Es necesario un carnet de conducir para motos náuticas?

La respuesta de AMW es clara: “Sí, siempre que la moto sea de uso personal”. Es decir, si es de nuestra propiedad o de algún amigo o familiar, será necesario disponer de un permiso especial. Se trata de una licencia, una titulación que podemos obtener en distintas escuelas náuticas, como OceaNautic, en Málaga, o la Federación Andaluza de Motonáutica.

Ahora bien, si alquilamos una moto de agua, ya sea por horas, en circuito o en excursiones colectivas, no necesitaremos disponer de ningún permiso. En este caso, como asegura AMW, serán los propios monitores los que deban instruir a los clientes en su manejo.

¿Qué tipo de licencia es necesaria?

Como explica la aseguradora, “a los interesados en gobernar motos náuticas sin limitación de potencia, en la modalidad de uso particular o arrendamiento por días, se les exige estar en posesión de uno de los siguientes títulos náuticos-deportivos: patrón de navegación básica, patrón de embarcación de recreo, patrón de yate, capitán de yate o licencia de navegación”.

Por lo menos, esta es la nueva situación desde la entrada en vigor del Real Decreto 238/2019, que ha permitido la última renovación de los tres tipos de permisos anteriores hasta el pasado 1 de julio de 2024. Regulados por el ya citado Real Decreto 875/2014, estos variaban en tres categorías (Clase A, Clase B y Clase C), en función de la potencia de la turbina.

Por último, desde AMW sostienen que es obligatorio contratar un seguro de moto de agua, ya que la multa por no hacerlo puede ascender a los 20.000 €.

Consejos para conducir una moto de agua

Antes de lanzarse al mar y disfrutar de la emoción de conducir una moto acuática, es importante atender a una serie de pautas para garantizar que la experiencia sea segura. Por ello, los expertos de AMW no dudan en ofrecer algunos consejos de gran importancia.

Además de cuestiones básicas, como conducir con buen tiempo o asegurarnos de que la moto se encuentra en perfecto estado, enfatizan en la importancia de no sobrepasar el número de ocupantes homologados. “No sólo porque es peligroso, sino porque nos podría caer una sanción”, añaden.

Asimismo, recuerdan que “es obligatorio ponerse un chaleco salvavidas homologado”, así como prendas de protección contra el frío de colores llamativas, una mochila con señales luminosas, algún alimento con alto valor energético y agua. Además, “hay que conectar siempre el sistema “hombre al agua” de la embarcación” y conducir con responsabilidad. “La guardia civil hace controles de velocidad y alcoholemia también en el agua”.

Finalmente, debemos navegar por zonas habilitadas y es aconsejable comunicarle a algún amigo o familiar dónde vamos a estar y durante cuánto tiempo. De esta manera nos aseguraremos de que la experiencia sea, no sólo divertida, sino también segura.