Un millón de jóvenes podría beneficiarse del nuevo carné B1

La Dirección General de Tráfico ha puesto en marcha su Estrategia de Seguridad Vial 2030 y en el ámbito de la Actuación 2022-2023 introducirá un nuevo permiso de conducción, el B1, que permitirá a los jóvenes desde los 16 años acceder a la posibilidad de conducir cuadraciclos con la homologación L7. Esta reconsideración de la norma se sitúa en línea con la Directiva Europea 2006/126/CE y fue propuesta por AEDIVE y la consultora Pons Mobility el pasado mes de noviembre.

Este permiso B1 habilitaría para conducir cuadriciclos con un peso en vacío inferior o igual a 400 kilos, que serían 550 para los vehículos destinados al transporte de mercancías; sin contabilizar en esa masa el peso de las baterías de los que son eléctricos. Además, la potencia del motor de esos vehículos será igual o inferior a 15 kW (20 CV).

Según las estimaciones de AEDIVE y Pons Mobility, los proponentes de este cambio normativo, aproximadamente un millón de jóvenes entre los 16 y 18 años podrían beneficiarse de esta medida y acceder a conducir un vehículo de cuatro ruedas eléctrico, más seguro que si utilizasen, por ejemplo, una motocicleta y que les aportaría una experiencia previa para la conducción de automóviles de mayor potencia.

Por otro lado, los cuadraciclos pesados que podrían conducirse con el nuevo carné tienen las medidas de seguridad que se exigen a los de la categoría M, es decir, los turismos y similares que pueden conducirse con el carné B.

La oferta de los cuadraciclos, además, es en su gran mayoría eléctricos, con lo que su utilización encaja con la reducción de emisiones de CO2 pretendida por la Unión Europea para todos los países pertenecientes a la misma; lo que también supone un paso más para la concienciación de los jóvenes conductores de cara a una conducción eficiente.