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Así deberías conducir para ahorrar gasolina: la conducción eficiente

Estos son algunos sencillos hábitos y soluciones que pueden ayudar a reducir drásticamente el gasto del combustible

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La mejor forma de reducir el gasto de combustible, la conducción eficiente / Neomotor
R.D.

13 de mayo 2022 - 13:58

Casi todo conductor coge el coche a diario, por lo que no es de extrañar que se gasten miles de cientos de euros en combustible al año. Es bastante común ver que la gente se gaste más dinero en combustible que en comer, salir con amigos o incluso en el alquiler, pero la situación está descontrolada y los precios del petróleo suben como la espuma.

Matas Buzelis, un experto en automoción de la plataforma de comprobación de historiales carVertical, nos cuenta unos sencillos hábitos y soluciones que nos pueden ayudar favorablemente a reducir el gasto en nuestro combustible.

Conducir con suavidad

Todos sabemos que conducir con brusquedad dispara el gasto de combustible, las aceleraciones, los frenazos... Una investigación científica ha demostrado que se puede reducir la eficiencia del combustible en un 40% en los casos de conducción agresiva.

El problema se puede solucionar de manera fácil, evitando los malos hábitos citados previamente, se consigue una conducción eficiente que es además lo que aconseja la DGT.

Debemos recordar que los hábitos de conducción agresivo nos nos rebajan en uno o dos minutos de trayecto, por lo que no merece la pena, ya que se gasta más combustible y dinero de nuestros bolsillos.

Reducir el consumo del aire acondicionado

Los sistemas de climatización de los automóviles de hoy en día, suelen dejar el aire acondicionado funcionando aunque no sea necesario, el compresor del aire aumenta hasta el 30% el consumo de combustible.

Los sistemas de aire son muy cómodos, no solo para refrescar el habitáculo en los días calurosos, sino para resecar en los días lluvioso, pero como en todos los sentidos de la vida, debemos saber usarlo de manera moderada.

Comprobar la presión de los neumáticos con regularidad

Todos los fabricantes de automóviles calculan la presión óptima de cada neumático dependiendo de cada tipo de vehículo. Ahora bien, debemos respetar las indicaciones de los profesionales. Si los neumáticos tienen la presión baja, la resistencia de rodadura será mayor, por lo que el combustible será demandado en altas cantidades para mantener la velocidad.

Tratar de reducir el peso innecesario

Se va acercando el momento vacaciones, pero debemos saber que cuanto más pesa el vehículo, mayor es el consumo de combustible. Los ingenieros automovilísticos, quitan la rueda de repuesto y eligen aluminio, incluso plástico para reducir el peso del coche al mínimo.

Recuerda, tu coche no es un almacén, tener el coche ordenado y libre de bultos, puede hacer que tu cartera se llene de 'bultos' necesarios.

Evita los atascos

Con lo tedioso que llegan a ser los atascos, debemos saber que evitarlos en la media de lo posible es lo que mejor le pude venir a nuestro vehículo. Arrancar y frenar constantemente hace que se fuerce el motor, la suspensión y la caja de cambios. Con esto, ya sabes, elige la ruta más larga con menos tráfico... tu coche y tú bolsillo te lo agradecerán.

Planifica tus viajes con antelación

Si eres de los que haces trayectos cortos en tu rutina de diario, mala suerte, porque se dice que se gasta más combustible. Es buena idea tratar de hacer más de una tara en el mismo viaje. Forzar en exceso el motor sin calentarlo acabará haciendo que se estropee el vehículo.

Elegir un automóvil que consuma poco

El elegir un coche que consuma una cantidad razonable de combustible es primordial para después no arrepentirse. Un modesto modelo como el típico familiar compacto hace que la satisfacción por lo adquirido sea buena. Esta gama de coche suele ser fácil aparcarlo en las ciudades, cabe un gran número de pasajeros, el equipaje tiene su lugar.

Cuidar el coche a diario

Algo tan simple, como es mantener el buen mantenimiento regular del coche, puede hacer que se disminuya el gasto de combustible, casi el doble.

A menudo basta con solo cambiar los malos hábitos de conducción y mantener un buen mantenimiento para ahorrarse algunos gastos y disfrutar mucho más de la experiencia de tener un coche.

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