Audi Q5, una nueva generación ya sólo microhíbrida o híbrida enchufable

Si la Q se utiliza en Audi para identificar a sus carrocerías de tipo SUV, los números impares ahora se emplean para los modelos que exclusivamente emplean motores de combustión. Ahora bien, en línea con lo que mandan los tiempos, estos ofrecen cierta electrificación, como es el caso de los que recibe el Q5, por otro lado, el primer SUV que cuenta con la nueva plataforma PPC -Plataforma Premium de Combustión- recientemente estrenada por el A5.

El Audi Q5 2024 es la tercera generación de este SUV de tamaño medio -la primera, de 2008-, se pone a la venta con carrocería SUV -la de aspecto coupé, la Sportback no ha sido anunciada-; y mejora en tecnología y eficiencia respecto a su antecesora. Se produce, como esta última, en la planta de Audi en México, en San José de Chiapa, un extremo relevante para la marca por la proximidad de esta factoría al mercado norteamericano.

La tercera generación del Audi Q5 presenta un diseño exterior definido por una silueta de hombros más marcados, con un aspecto más alargado y dinámico que su antecesor. El frontal dispone de una parrilla más ancha y alta que antes, junto con entradas de aire verticales y funcionales; mientras que la trasera cuenta con una barra luminosa que va de lado a lado, un difusor integrado en el paragolpes o salidas de escape que varían según el motor de que se trate.

En la carrocería, y más allá del diseño del frontal o la trasera, se carenan los bajos o se utilizan cortinas de aire y deflectores para canalizar el flujo de aire y dirigirlo más allá del paso de rueda, mientras que los paneles aerodinámicos laterales de la trasera dirigen el aire por encima del techo, a lo que también contribuye el spoiler.

De cara a reducir la rumorosidad, el parabrisas está equipado de serie con un acristalamiento acústico, mientras que es una opción disponible para para las ventanillas laterales.

Los pilotos traseros tienen un diseño tridimensional y emplean OLED de segunda generación, con una luz de proyección en el spoiler sobre la luneta, utilizadas por primera vez en Europa, para la tercera luz de freno; mientras que en los faros frontales Matrix Led pueden crear firmas lumínicas diferenciadas elegidas por los clientes.

Audi ofrece tres acabados exteriores para el Q5: Advanced, S line y Black line. Cada uno presenta detalles específicos en la parrilla, las entradas de aire, el difusor y otros elementos. Se puede elegir entre once colores de carrocería, así como otros configurables personalmente por el cliente a través de Audi exclusive.

En cuanto a las llantas, son siempre de aleación con tamaños comprendidos entre 19 y 21", dependiendo esto del acabado y motor elegido.

El interior destaca con un salpicadero de estructura horizontal con las salidas de aire integradas. La consola central y las puertas están adornadas con componentes en forma de C y aspecto de aluminio, los cuales rodean los mandos.

En relación a las pantallas, hay una para la instrumentación de 11,9, que está reforzada por un head-up display con nuevas funciones y configurable; y otra para el sistema de infoentretenimiento de 14,5", éste con software basado en Android Automotive OS. De forma opcional, se puede instalar el MMI passenger display de 10,9" para el acompañante de la plaza delantera en la que éste puede usar el sistema de infoentretenimiento sin que el conductor se distraiga por su "modo de privacidad activa con tecnología de obturación": el conductor sólo ve una pantalla negra. El asistente de voz tiene soporte de IA y los contenidos de ambas pantallas MMI pueden actualizarse over-the-air, en tanto que aplicaciones como YouTube están disponibles a través de la tienda online e integradas.

Ese sistema de infoentenimiento también tiene integrado el control de un equipo de sonido Bang & Olufsen Premium con 16 altavoces y 685 vatios de potencia.

Las tres versiones de lanzamiento tienen una microhibridación basada en una arquitectura eléctrica de 48 voltios y que emplea un generador capaz de ofrecer una potencia de 24 CV (18 kW) y 230 Nm de par máximo. Está unido al motor térmico por una correa y alimentado por una batería de 1,7 kWh con química LFP. Este nuevo generador permite el desplazamiento del Q5 sólo con electricidad, asiste al motor de combustión y ayuda a reducir el consumo de combustible. También recupera energía cuando no se está acelerando.

El motor de acceso es el 2.0 TFSI de 204 CV y con un par máximo de 340 Nm. Como en todos los Q5, la transmisión es automática y con tracción delantera o Quattro. En Diesel, el motor base es el 2.0 TDI con la misma potencia pero 400 Nm de par y que Audi ofrece únicamente con tracción total. Como variante tope de gama, el SQ5 utiliza el V6 TFSI de 3 litros de cilindrada, que genera una potencia máxima de 367 CV y un par de 550 Nm. La tracción total es de serie. Más adelante llegarán las versiones híbridas enchufables, aún sin anunciarse.

En el chasis, este SUV equipa de serie una dirección progresiva y una suspensión de muelles de acero que, en opción, puede reemplazarse por una de ajuste deportivo en las versiones 2.0 TFSI y 2.0 TDI y que es de serie en el Audi SQ5. En ambos casos, los amortiguadores son de tipo FSD (Frequency Selective Damping), si bien los pilotados se ofrecen en combinación una suspensión neumática opcional.

Entre las ayudas a la conducción de esta nueva generación del Q5 están el aparcamiento trasero con indicador de distancia, el control de crucero y limitador de velocidad, el aviso de salida de carril, el asistente de eficiencia y el asistente de atención y somnolencia, sistemas que son de serie. Opcionalmente, puede contar con el asistente de conducción adaptativa plus, que utiliza información cartográfica y datos ofrecidos por otros Audi para optimizar el reconocimiento de las señales de tráfico y ayudar en la aceleración, el mantenimiento de la velocidad y la distancia, así como la orientación en el carril. Por su parte, el asistente de frenada activo combina el asistente de frenada de emergencia delantero, el de esquiva, el de giro y el de tráfico cruzado delantero. Otros sistemas disponibles son el control de crucero basado en señales de tráfico, el park assist plus y el asistente de giro trasero.

En Alemania, donde ya se han proporcionado precios, éstos arrancan en 53.200 euros, que es lo que cuesta el 2.0 TFSI, con unos 30.000 más para el SQ5.