La aldaba
Carlos Navarro Antolín
La lección de Manu Sánchez
DGT
La Dirección General de Tráfico llama un año más a la prudencia y a la atención en carretera. El verano es época de viajes hacia otras provincias y es uno de los períodos del año en los que más accidentes al volante se producen. La DGT ha lanzado una serie de consejos para mantener nuestro vehículo en buen estado antes de realizar nuestro trayecto y sobre otras cuestiones como el conocido como efecto acordeón.
El carril derecho es el indicado para realizar de manera frecuente la circulación. De esta manera, cuando se conduce ocupando el carril central se puede poner en peligro a otros conductores y a nosotros mismos, ya que obligamos a los otros vehículos a realizar la conducción en zigzag para evitar colisionar con nosotros. Al cambiar de forma continuada de carril para evitar al vehículo que circula por el central suben los accidentes y provoca numerosos atascos, dado que los demás conductores se ven obligados a frenar.
Esta circunstancia es la que se denomina como "efecto acordeón", y viene provocado cuando un conductor es obligado a frenar, reduciendo su velocidad de forma rápida y violenta y provocando que los demás conductores deban actuar de la misma manera.
El sol provoca deslumbramientos a la hora de conducir que hacen que perdamos la visión de la carretera de manera momentánea. Por este motivo, la DGT recomienda usar gafas de sol con cristales polarizados o hacer uso del parasol incluido en nuestro vehículo. Durante la circulación nocturna, se aconseja regular de manera correcta el retrovisor para que las luces del coche de atrás no nos deslumbre.
No obstante, si durante la marcha nos sintiéramos deslumbrados, lo más recomendable es reducir la velocidad y seguir el sentido de la carretera sin que se produzca la salida del carril.
Tras las sucesivas restricciones por el coronavirus, nuestro coche puede que haya permanecido un largo tiempo sin realizar trayectos más largos. Por ello, es de obligación visitar nuestro taller para realizarle una revisión a fondo que nos evite riesgos a la hora de volver a conducir por carretera. Otros elementos como las pastillas de freno o la banda de rozadura de las ruedas pueden revisarse manualmente y de forma periódica.
Cuando seamos conscientes de que nuestro coche pueda estar sufriendo algún tipo de avería debemos detener el vehículo en un sitio seguro. Si se produce cuando estamos circulando por autovía o autopista, debemos tomar la primera salida a fin de evitar riesgos a los otros vehículos. Además, señalice de manera correcta la posición del coche, haciendo uso de las luces de emergencia y los triángulos de preseñalización. Y recuerda que a partir del día 1 de julio se podrá usar en estos casos la señal V-16.
Si se realiza la marcha con frenados bruscos, giros demasiado violentos o aceleraciones demasiado grandes todos los sistemas de nuestro vehículo sufrirán, hasta que finalmente esto desemboque en una avería. Conducir de manera correcta puede evitar el desgaste de estos sistemas.
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