Trucos para conseguir el aparcamiento perfecto

Pocas cosas alegran más el día a día de una persona que vuelve a casa después de una larga jornada laboral que encontrar un sitio para aparcar el coche a la primera y en la puerta de su casa. Ni nada que desespere tanto como tener que llevarte más de media hora buscando aparcamiento en algunos de los puntos negros para aparcar que hay en Sevilla y cuando lo haces no ser capaz de aparcarlo en condiciones a pesar de que podrías hacerlo apurando tus movimientos.

Aparcar nuestro vehículo es una de las acciones más comunes que realizamos al volante. Todos hemos debido aprender a hacerlo cuando nos sacamos el permiso de circulación, pero con el paso de los años terminamos olvidando esas pautas concretas que nos enseñaron, nos quedamos con algunos vicios adquiridos y llegar los problemas y los nervios cuando comprobamos con ofuscación que el coche no entra la primera en el hueco que nos tiene reservado el destino.

Pero saber estacionar bien el coche no significa necesariamente meterlo a la primera. En uno de los ejemplares de la revista digital de la Dirección General de Tráfico nos enseñan los trucos para conseguir el aparcamiento perfecto.

Para aparcar con precisión y seguridad "se requiere capacidad de observación y cierta soltura en el manejo del vehículo. No importa tanto la técnica empleada para aparcar como saber hacerlo en lugar adecuado y con seguridad", aseguran en dicha publicación.

En cualquier maniobra de estacionamiento, la señalización resulta clave. Señalizando la maniobra antes de detener el vehículo evitaremos crear peligro o entorpecer a otros conductores.

También es importante saber detenerse en el lugar adecuado. Si la vía es de sentido único podremos hacerlo a derecha o izquierda, pero si es de doble sentido sólo está permitido aparcar en el lado derecho.

Tipos de aparcamiento y cómo ejecutarlos

Existen dos formas principales de aparcar en paralelo a la calzada (en línea) y en perpendicular (en batería). Para hacerlo de forma correcto en batería estos son los pasos que hay que llevar a cabo:

1. Iniciar la maniobra con nuestro parachoques en línea con el del vehículo ya aparcado
2. Dar marcha atrás con todo el volante girado hacia el lado donde aparcamos
3. Observar el espejo derecho para cerciorarnos de que no rozamos el primer coche cuando la rueda trasera rebase su faro.
4. Mirar el espejo izquierdo y seguir retrocediendo
5. Dar marcha adelante para centrar el vehículo en el caso de que sea necesario y la ejecución lo requiera.

Si, por el contrario, el aparcamiento que debemos ejecutar es en línea estas serán las pautas que tendremos que seguir para terminar la maniobra de forma satisfactoria.

1. Señalizar la maniobra para evitar retenciones
2. Alinear el eje trasero con el parachoques del vehículo ya aparcado
3. Girar el volante a la derecha y retroceder hasta que nuestro retrovisor izquierdo apunte a la mitad del vehículo de atrás. Otra referencia útil es el espejo derecho a la altura del parachoques del vehículo de al lado.
4. Cambiar el giro a la izquierda y seguir retrocediendo. Si lo necesitamos, podemos dar marcha adelante para terminar la maniobra.