Toyota desarrolla una clínica móvil con pila de combustible

Toyota ha desarrollado para Cruz Roja de Japón una clínica móvil propulsada por una pila de combustible, utilizando como punto de partida un minibús, el Coaster, de 7,16 m de largo y un sistema de producción de electricidad semejante al que utiliza el Mirai.

Esta clínica se mueve gracias al hidrógeno que reposta y se convierte en electricidad en su pila de combustible y aporta una solución para lugares donde se producen catástrofes o desastres naturales, más allá de que también puede usarse para prestar servicios de forma habitual, ya que además de atender a las personas puede producir electricidad con la que suministrar energía a las zonas afectadas. Por otro lado, esta clínica móvil se mueve sin emisiones de CO2 ni ningún tipo otro tipo de contaminante.

Su motor tiene una potencia de 155 CV, con la que alcanza los 100 km/h y una autonomía eléctrica de 210 km. Su pila está alimentada por tres depósitos que almacenan 7,2 kilos de hídrógeno gaseoso suministrado a 700 bares.

La pila de combustible desarrollada por Toyota puede trabajar como generador eléctrico no sólo para el motor, para lo que cuenta con varias tomas auxiliares, tanto en su interior como en su carrocería, que permiten alimentar a distintos aparatos de 100 V, que es el voltaje habitual en la red eléctrica de Japón.

También tiene un sistema de alimentación de corriente continua externo que puede aportar hasta 9 kW de potencia y unos 90 kWh de capacidad.

En su habitáculo, está dotado con un sistema de aire acondicionado con filtros HEPA -índice de captación de, al menos, el 99,97% de partículas de hasta 0,3 μm de diámetro- para depurar el flujo que entra.