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Francisco Andrés Gallardo
Emperatriz
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Stellantis pretende ser líder del mercado en vehículos de bajas emisiones. Hasta 2030 el objetivo es que el mix de este tipo de vehículos alcance un crecimiento sostenido del 70 por ciento, un 10 por ciento por encima de las previsiones del sector respecto al mix de mercado general.
Para poner en práctica esta estrategia, Stellantis va a invertir más de 30.000 millones de euros durante los próximos cuatro años en electrificación y desarrollo de software. Esta inversión llevaría a Stellantis, según fuentes da empresa, a ser líder del sector en el segmento de los vehículos comerciales en Europa, reforzando también su posición en Norteamérica. La adopción de sinergias y la implantación a todos los vehículos se producirá durante los próximos tres años, incluyendo en ese plan la incorporación a la oferta de industriales de pilas de combustible a finales de este año.
La ruta también exige un abastecimiento seguro de baterías, para lo que la compañía se garantizará el suministro de 130 GWh en 2025 y el doble en 2030. Estas baterías procederán de cinco gigafábricas europeas y norteamericanas y su producción se complementará con acuerdos adicionales para cubrir toda la demanda del grupo.
Las estrategias de abastecimiento, desarrollos técnicos y sinergias de fabricación llevará a que las baterías se abaraten más de un 40 por ciento de aquí a 2024 y con un 20 por ciento adicional en 2030.
Hacer vehículos eléctricos asequibles es una prioridad de Stellantis, quien pretende que, en 2026 el coste total de estos sea equivalente al de uno de combustión interna.
Cada una de las 14 marcas del grupo debe ofrecer soluciones de electrificación propias, reforzando el ADN de cada una de ellas y con los siguientes enfoques.
Las cuatro plataformas utilizadas serían:
Los sistemas de propulsión incluyen una gama de tres módulos eléctricos -motor, transmisión e inversor- que pueden usarse montados en el eje delantero, trasero o ambos de un vehículo. La combinación de estos con las plataformas y diferentes baterías permitirán el desarrollo de diferentes opciones; además de que las actualizaciones de hardware y de software inalámbricas llevarían a prolongar la vida de las plataformas.
Se prevé contar en 2024 con dos químicas diferentes para las baterías: una de alta densidad, de tipo NCM y otra que, probablemente, sería LiFePo.En 2026 llegarían a Stellantis las baterías de estado sólido.
En el caso concreto de Opel, la firma de Rüsselsheim se centrará en la producción exclusiva de vehículos eléctricos a partir de 2028. De hecho, ese año ya sólo comercializará este tipo de motorizaciones en Europa, su principal mercado, según su director general,. “Opel está pasando de ser una marca más a marcar las tendencias. Nos dirigimos hacia un futuro libre de emisiones de CO 2 , ya que el CO2 es la nueva moneda en nuestra industria”, afirmó el directivo en el marco del EV Day 2021.
Opel también reinventará el Manta, tras mostrar el concept-car Manta GSe ElektroMOD, un icono de la firma que, a mediados de la década, entraría en producción y exclusivamente como coche eléctrico. Antes, en 2024 todos los Opel tendrán su versión electrificada.
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