El Mitsubishi Colt reaparece con los genes del Renault Clio
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Parecía un coche ya defenestrado, en tanto que la última generación a la venta, la sexta, lo estuvo desde 2011; pero el Colt vuelve. Lo hace reencarnado en el Renault Clio, de similar manera a cómo el ASX lo hace en el Captur, y así estará en los concesionarios en octubre.
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Tras un decenio largo sin Colt en su catálogo, Mitsubishi vuelve a disponer de él. Será la séptima generación de este utilitario, ahora de 4,05 m de largo, fabricado a partir la plataforma CMF-B de la Alianza y que estará a la venta después del verano. Serán cuatro los acabados disponibles -Spirit, Motion, Kaiteki y Kaiteki+- y tres los motores.
El más modesto por potencia con sus 65 CV es un tres cilindros de un litro que siempre está ligado a un cambio manual de cinco marchas; el siguiente ya con 90 CV, tendría la base del anterior pero estaría sobrealimentado con un turbo y la caja pasaría a ser de seis velocidades; mientras que el tope de potencia recaería sobre un híbrido. Este dispone de un cuatro cilindros en línea de 1,6 litros que trabaja con un motor eléctrico de tracción y otro destinado a genera energía. La potencia total del sistema híbrido es de 145 CV. Tiene una batería de 1,2 kWh de capacidad.
En el habitáculo, la instrumentación tendrá un panel central para el ordenador de 7" o una pantalla totalmente digital de 10", mientras que en el centro del salpicadero se podrá elegir entre una de 7 o 9,3" para el sistema multimedia. Algunas funciones de este pueden controlarse vocalmente, además de que el Colt ofrece concectividad con Apple CarPlay y Android Auto. Entre el equipamiento de confort estarán el volante o los asientos calefactados o el sistema de acceso y arranque sin llave. Igualmente, un equipo de sonido Bose o iluminación ambiental.
Tiene tiene sensores de aparcamiento, cámara y radar para dar cobertura a diferentes ADAS. Entre ellas están el control de crucero adaptativo con Stop & Go, el monitor de visión periférica, el alumbrado de carretera automático, el aviso de vehículos en el ángulo muerto, el sistema de mitigación de colisión frontal, el avisador de cambio involuntario de carril, el asistente de mantenimiento de carril, el asistente de estacionamiento, la alerta de tráfico cruzado posterior o el reconocimiento de señales.
La garantía de fábrica será por cinco años o 100.000 km, lo que primero se produzca; y,en el caso de la versión híbrida, y para la batería, se extenderá a ocho años o 160.000 km. Su producción arrancará en septiembre en la planta de Bursa (Turquía) de Renault.
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