Mini Vision Urbanaut, un monovolumen transformable con un futuro cierto

El Mini Vision Ubranaut se presentó como concept-car en noviembre del año pasado. Ahora, vuelve a mostrarse una revisión de ese show-car de 4,47 m -algo más grande de lo que lo es el Mini de mayor tamaño de la gama actual, el Countryman- con carrocería de monolumen y una alta flexibilidad interior, en tanto que presenta un espacio habitable que puede disponerse en función de las diferentes situaciones que pueden producirse en el día a día de un vehículo.

Enfocado con el objetivo del “uso inteligente del espacio” el Vision Urbanaut pretende desde crear un oasis urbano hasta experimentar con el momento Wanderlust, que puede traducirse como la pasión por disfrutar del viaje.

La carrocería y el habitáculo se transforman para adaptarse a cada momento que Mini identifica, además de como “wanderlust, como Chili o Vibe. Para ello, la fragancia emitida, el sonido -música especialmente compuesta para este modelo- y la iluminación ambiental refuerzan el espacio creado en función de cada una de esas situaciones.

Así Chili sería la situación en la que se hace una pausa y el Urbanaut se convierte en un lugar de aislamiento, incluso un espacio de trabajo, gracias a la posibilidad de transformar la banqueta trasera para poder sentarse o tumbarse, con un área central en la que el reloj de la instrumentación se pliega como una lámpara y desaparecen pantallas o interruptores.

Wanderlust supone la conducción de forma autónoma o con la ayuda de los asistentes. En él el interior el Urbanaut se convierte en un medio de transporte de manera que si el conductor quiere tomar el control bastaría con dar un toque al logo de Mini para que surjan volante y pedales, mientras que se adaptan los gráficos de la instrumentación con información sobre el trayecto.

Con la configuración Vibe se pretende fomentar la relación interpersonal entre los pasajeros, para lo que la puerta trasera lateral se abre y el parabrisas se pliega, de modo que se eliminan los límites entre habitáculo y exterior. La pantalla central de la instrumentación se convierte en un centro de control multimedia y se crea un ambiente “club” en el interior. Además, hay una opción denominada “my momento” personalizable por los usuarios.

El Mini Vision Urbanaut ha sido diseñado por el estudio de Múnich y, cada pieza, se ha utilizado con herramientas de última generación artesanalmente, para lo que han participado especialistas que abarcan desde la construcción clásica de un coche a fabricantes de muebles junto a programadores o integradores de tecnología.

Mini no ha dado pistas sobre qué sistema de propulsión usará, aunque BMW espera que Mini sea una marca eléctrica en 2030 y, por eso, podría ser un modelo exclusivamente animado por baterías cuando se comience a producir.