El Mazda CX-5 estrena restyling con el 2022

El CX-5, un modelo lanzado en 2012 y que tuvo su gran cambio generacional en 2016, estrenará año incorporando algunas modificaciones de peso semejante a las que ya se incorporaron en 2020 o 2021. Entre ellas estará la aparición del Mazda Intelligent Drive Selec (Mi-Drive) que permite al conductor elegir el modo de conducción más conveniente a cada situación con un interruptor. En los casos en los que el CX-5 tiene tracción total se suma a los modos de conducción Off-Road adecuado para superficies con poco agarre.

Otros cambios atañen al aspecto de la carrocería -parrilla, faros, pilotos, un nuevo color para la pintura…-, elementos de la suspensión o asientos. Estructuralmente es más rígido.

La gama se estructura con seis niveles de acabado: Origin, Evolution, Newground, Zenith, Homura y Signature. El nuevo intermedio Newground es un desarrollo a partir del Evolution y tiene detalles en negro o llantas de 19”, también una tapicería simil de cuero. En lo que respecta al Homura, ocurre otro tanto respecto al Zenith y, en este caso, también tomando detalles en negro en paragolpes, pasos de rueda, retrovisores..., además de las llantas. Aquí el cuero es negro para la tapicería.

En el habitáculo aparece una superficie para la carga inalámbrica de móviles en la consola central, suelo de maletero y plano de carga están a la misma altura gracias a una superficie móvil de dos piezas y, en el Newground, una de sus caras es impermeable.

Entre las ayudas a la conducción se alinea la combinación del control de acelerador, freno y dirección en tráfico lento, que en Mazda se llama CTS, y los faros adaptativos tienen mayor número de leds que antes: de 12 se pasa a contar con 20, lo que da una distribución del haz de luz más preciso.

La oferta de motores la siguen conformando los mismos motores: dos de gasolina, de 165 y 194 CV; y otros tantos Diesel, de 150 y 184 CV, combinándose con cambios manuales y automáticos. También con tracción delantera o total.