El DS 3 estrena cara y renueva su sistema de propulsión eléctrico para ir más lejos

El DS3 nació como un utilitario de tres puertas -con versión cerrada y cabrio- de algo menos de cuatro metros de largo y derivado directamente del Citroën C3. Sin embargo, hace cuatro años, en 2019, se transformó en lo que hoy es: un crossover, ya con cinco puertas y una longitud de carrocería 16,4 cm más larga, de 4,12 m y, sobre todo, su altura pasó de los 1,46 m a los 1,55 m, 6 cm que los situaban más cerca de los SUV que de los utilitarios. Para remarcar ese carácter fronterizo, este DS 3 apostillaba su nombre con la denominación Crossback.

Esta hoy se cae por innecesaria del nombre del DS 3, un coche que se sigue siendo, con los datos de 2022, el tercer pilar de ventas de la marca. Lo es tras el DS 7 Crossback, que acaparó un 50 por ciento de las casi 5.000 unidades comercializadas por DS en ese ejercicio; y el DS 4, que alcanzó un 33 por ciento de las ventas. El DS 3, aún Crossback, llegó al 15 por ciento. Además, sumado a ellos el DS 9, las actuales generaciones de los cuatro modelos de DS -el más veterano el DS 7, en el mercado desde abril de 2018, el más moderno este DS 9, lanzado en junio de 2021- sumarían un total de 20.000 unidades.

La revitalización estética del DS3 pasa por numerosos cambios en el frontal. Es el caso de la nueva parrilla, ensanchada y configurada por puntas de diamantes en negro brillante o cromadas, según la versión. Los faros, que ahora son en todas las versiones de led y están disponibles en opción como matriciales o, bajo estos y en vertical, las luces diurnas dobles que le dan un aspecto diferencial y le dan imagen de continuidad familiar con los DS4 y DS7.

También hay mejoras técnicas, en tanto que la parrilla o el paragolpes afinan su efecto aerodinámico e, incluso, se crean en la zona inferior nuevos aerofoils. Este objetivo de conseguir una aerodinámica favorable está presente a través de otros elementos de la arrocería como la aleta de tiburón que está situada sobre el techo para dar el servicio de antena o las manillas de las puertas enrasadas en los paneles de las puertas. De éstas, apuntamos que las traseras no ofrecen un ángulo muy amplio cuando se abren que facilite el acceso, no ya tanto a quienes puedan hacerlo por sí mismos, como cuando hay que introducir a un niño en su silla, por ejemplo.

La zona posterior cambia mucho menos, si bien los pilotos están unidos por una tira lacada en la que ahora se sitúa el nombre de la marca: DS Automobiles.

Las llantas disponibles son de 17 o 18” y DS las liga a los diferentes acabados de modo que, por ejemplo, los Bastille, que es el nivel básico, pueden disponer de ambos tamaños, siendo el primer de serie y el segundo, opcional; mientras que el de 18” es el utilizado de fábrica en los Rivoli y Opera. Los Performance Line y Performance Line+ recurren, respectivamente a las de 17 y 18”. La mayoría de ellas están acabadas en negro y son de corte diamantado cuando se trata de las de mayor diámetro.

En el interior los cambios fundamentales están en volante y pantalla de central. El primero incorpora también, junto al cambio de forma, una redistribución de funciones en sus radios e incluye las levas del volante en las versiones con cambio automático. Tras él, se sitúa la pantalla para la instrumentación de 7” y, en opción, un head-up display. Además, el DS3 tiene en esa pantalla de 10,3” un nuevo sistema de infoentreteniento.

La atención por el detalle no sólo se percibe en, por ejemplo, el tapizado del salpicadero con cuero o Alcantara en los niveles más altos, sino también en la utilización de muy diversos tapizados para los asientos, de modo que en el acabado Opera, el más alto, son de cuero Nappa y con un diseño que con el que se evoca, según la marca, el diseño de la correa de un reloj. En los Rivoli, la tapicería es mixta, de piel y tela; mientras que en los Performance aparece el Alcantara. Por su parte, los Bastille son los únicos íntegramente tapizados con tela.

Al volante se percibe impresión de calidad en cuanto a los acabados, con una posición a los mandos confortable y un buen control de las funciones, particularmente de las situadas en la zona central por sus enormes pulsadores.

Dos de gasolina y un Diesel, más un nuevo eléctrico

La oferta de motores de combustión no cambia respecto al último porfolio conocido de este modelo, de manera que dispone de un 1.2 PureTech de 100 CV combinado con una caja manual de seis velocidades y una versión del mismo motor tricilíndrico de gasolina de 130 CV con una automática de ocho marchas con convertidor de par. Esta misma caja es la utilizada en la única versión Diesel, una 1.5 BlueHDI, también de 130 CV. Ninguno de ellos incorpora ningún tipo de microhibridación, de modo que tienen la etiqueta C de la DGT.

El que sí cambia es el eléctrico, el de los E-Tense, que también se alinea en la familia DS 3 ya con su distintivo de cero emisiones. Y es que a este modelo le corresponde dentro de la familia Stellantis estrenar el nuevo sistema de propulsión que es una evolución del inicialmente utilizado por este modelo desde su lanzamiento comercial.

Por un lado, dispone de un motor más potente del que inicialmente tenían los DS 3 E-Tense en tanto que pasa de los anteriores 136 CV (100 kW) a los actuales 156 CV (115 kW), si bien el par se mantiene en 260 Nm. Su potencia coincide con la de la versión más potente del 1.2 de gasolina con el que el DS 3 Crossback contó hasta finales de 2020.

Se trata de un motor nuevo en tanto que ahora está producido por una joint.venture de Stellantis y Nidec Leroy-Somer Holding. Este motor M3 de Emotors permite, si bien no varían las prestaciones -150 km/h y aceleración de 0 a 100 km/h en 8,7 s-, reducir el consumo unas décimas junto a otros recursos como la bomba de calor o la posibilidad de contar con preacondicionamiento térmico para el habitáculo. Junto a la nueva batería -está ubicada bajo los asientos delanteros y traseros y en el túncel central- que reemplaza a la de 50 kWh, ya con 102 celdas NCM 811 y 54 kWh de capacidad total -50,8 útil cuando antes era de 46 kWh-, permite que la autonomía con una carga aumente 63 km y alcance los 404 km.

En nuestra toma de contacto, mayoritariamente urbana, hemos registrado un consumo de 16 kWh/100 km que, efectivamente, casi correspondería con el combinado homologado por la marca, de modo que obtendríamos casi 400 km de alcance. Esta batería puede recargarse con hasta 11 o 100 kW de potencia, según usemos corriente alterna o continua.

El precio de estos DS 3 E-Tense arranca en 41.500 euros, con acabado Bastille y culmina en los 48.500 del Opera. En cuanto a los motores de gasolina se mueve entre los 28.950 euros del 100 CV con el acabado básico y los casi 10.000 euros más del de 130 CV con nivel Opera. Por su parte, el rango de precios del BlueHDI está entre 33.450 y 42.100 euros.