BMW ya ensambla pilas de combustible para el iX5 Hydrogen

El hidrógeno va a cobrar un papel clave en la movilidad y, empleado junto a los vehículos eléctricos con baterías, completará el panorama de la movilidad eléctrica.

De cara a su uso en el BMW iX5 Hydrogen, en su desarrollo se ha conseguido el doble de potencia de la pila de combustible de hidrógeno -producirán 125 kW- mientras que el peso y tamaño han disminuido. Esas celdas que conforman la pila son proporcionadas por Toyota, quien colabora con BMW desde 2013.

La construcción de esa pila es un proceso automatizado con una carcasa de fundición de aluminio en la planta de Landshut (Alemania), tras el cual se ajustan el resto de componentes.

Así, sobre la plataforma del BMW X5 existente, se monta el sistema de propulsión que en esta versión iX5 Hydrogen cuenta con dos tanques de plástico reforzado con fibra de carbono. Ambos pueden contener 6 kilos de H2 a una presión de 700 bares para alimentar la pila.

Ese hidrógeno, combinado con el oxígeno del aire empujado por el compresor, origina una reacción química en la membrana de la pila que produce electricidad y con la que se alimenta el motor eléctrico de quinta generación de BMW. En el iX5 Hydrogen entregará una potencia de 275 kW (374 CV).