Los Alfa Giulia y Stelvio simplifican su oferta a la vez que cambian ligeramente

Alfa incorpora algunas novedades en sus dos modelos de mayor tamaño, la berlina Giulia y el SUV Stelvio que se pondrán a la venta el próximo mes de febrero. En lo que respecta al aspecto, el mayor cambio se realiza en los faros, que son matriciales gracias al uso de leds y tienen una nueva firma lumínica, mientras que la parrilla se asemeja a la del último modelo en lanzarse de la marca, el Tonale. Las funciones de los pilotos varían, aunque la forma no lo hace.

En el habitáculo lo que cambia es la instrumentación, que si bien mantiene el diseño “binocular”, abandona los indicadores analógicos para ser reemplazados por una pantalla de 12,3”. Este cuadro ofrece tres configuraciones posibles, Evolved, Relax y Heritage.

Los nuevos Giulia y Stelvio disponen del certificado digital NFT. Este registro digital almacena la información esencial de cada unidad, generando un certificado que registra la historia de datos del vehículo. Esto permite verificar su valor residual, dado que garantiza que el mantenimiento sea el adecuado y se almacene sin capacidad de manipulación.

Los niveles de equipamiento son Super y Ti, cada uno con un paquete opcional que, respectivamente, se denomina Sprint o Veloce, tanto en Giulia como Stelvio.

También hay una versión de lanzamiento que se llama Competizione. Esta se vende con una pintura gris mate, cristales tintados, llantas de 21” y pinzas de freno rojas, como las costuras del salpicadero y asientos. Será de serie en ella la amortiguación regulable y el equipo de sonido Harman Kardon.

En cuanto a motores, el Diesel de 160 CV con tracción trasera está disponible en los dos modelos y ambos acabados, mientras que los otros son el de gasolina de 280 CV y el Diesel de 210 CV; los dos con tracción total. Desaparecen, por tanto, la versión de 190 CV del 2.2 turbodiésel, así como el 2.0 Turbo de gasolina de 200 CV. Alfa no ha comunicado si habrá cambios en los Quadrifoglio.