Este es el verdadero motivo por el que tu perro te sigue a todas partes

En Mascotíssimas sabemos que el perro es el mejor amigo del hombre. Siempre está dispuesto a acompañarnos en los mejores pero también en los malos momentos. Ellos son capaces de intuir cómo es nuestro estado de ánimo: si estamos felices, tristes, preocupados o enfadados.

Podría decirse que, si fuera por ellos, nos acompañarían las 24 horas del día a todas nuestras tareas, ya sea trabajar, hacer deporte o incluso ir al cuarto de baño. De hecho, seguramente tu mascota sea de esas que te siguen a todos lados. Si te levantas del sofá y vas a la cocina, escuchas sus patitas detrás. También es posible que desde que tienes un perro tu espacio personal se ha reducido porque no te deja tranquilo ni cuando vas al baño.

Pero, ¿existe alguna razón por la cuál tu perro hace eso? según cuenta la revista científica estadounidense Mental Floss, la mayoría de los investigadores destacan una serie de razones que justifican ese acompañamiento constante.

Motivo por el que tu perro te sigue a todas partes

Según los investigadores, el motivo principal por el que un perro acompaña a su amigo humano es por la "mentalidad de la manada". Si echamos la vista atrás nos daremos cuenta que estos animales provienen del lobo que fue domesticado hace miles de años y aunque ahora sean dos grupos de animales distintos, lo cierto es que genéticamente siguen compartiendo algunos rasgos.

Los lobos son animales de "manada" y tienen un sentido muy fuerte de este concepto junto a otros lobos. Con los perros pasa lo mismo, más aún cuando es el único animal de la casa. Su familia humana se convierte en su manada y, según explican los expertos, este instinto genético es también lo que motiva a los perros a observarte de cerca y a buscar tu contacto físico.

Otro de los motivos es que desde que son cachorros buscan un vínculo a través del contacto, por eso los cachorros siempre están más pegados a sus dueños humanos como si fueran sus madres. Al crecer, siguen manteniendo ese vínculo. Además, también necesitan un líder, y si están bien educados probablemente tú u otro miembro de la familia será la persona que le de las órdenes y obedezca siempre. Este vínculo les otorga confianza y seguridad.

La tercera y última explicación que da la ciencia tiene que ver con la educación del dueño hacia el animal y sus instintos naturales. Desde el primer momento que empieza la educación y el entrenamiento de un perro, el humano adopta una manera de recompensar lo que hace bien (con premios o golosinas). Quizás esto podría provocar que el animal relacione la presencia del humano con esos premios, por lo que le sigue allá donde va buscando una golosina o una muestra de afecto.