Un perro arrasa en las redes sociales por ser el primero que se comunica con palabras

Los perros al igual que otros animales también se comunican a través de gestos, sonidos e incluso a través de señales mostrando su lenguaje corporal, pero Bran es un perro especial que ha aprendido durante mucho tiempo a comunicarse de otra manera con su dueña.

La vida de este perro no fue fácil ya que pasó los primeros años de su vida en una perrera y a pesar de que encontró una familia, también lo terminó abandonando en un refugio por ser un perro demasiado juguetón y un poco nervioso.

Nuria es una chica que ama los animales y un día visitó un refugio de animales donde conoció la historia de Bran, por lo que decidió adoptarlo para siempre y darle una nueva oportunidad hasta que a día de hoy se ha convertido en su fiel compañero de vida.

Por norma general, los perros aprenden una serie de órdenes básicas cuando llegan a un nuevo hogar como "siéntate", "dame la patita", "quieto", "túmbate", etc, pero Nuria descubrió a través de las redes sociales a la pedagoga del lenguaje Christina Hunger, quien usaba una técnica del habla con botones en niños y que con el tiempo también empezó a usar el mismo método con perros.

Nuria sintió curiosidad por probar esta técnica con Bran y, para su sorpresa, funcionó. Ahora, el perro se ha convertido en todo un icono en la red social de Tik Tok donde acumula más de dos millones de seguidores y enseña cada día la forma tan peculiar de comunicarse con Nuria.

Bran ha aprendido a llamar a cada miembro de la familia y a expresarle a Nuria sus necesidades. A día de hoy sabe expresar 15 acciones como "jugar", "comer", "agua" o "calle. Cuando quiere algo aprieta un botón en el que Nuria ha grabado previamente su voz.

Su frase más larga es: "Ayuda, papi, casa, comer". Con estas cuatro palabras, Bran llama la atención de su padre para pedirle comida.

Se necesita constancia

Tal y como afirma Nuria esta técnica necesita constancia y mucha dedicación: "Igual que enseñas a tu perro a sentarse, a tumbarse o cualquier truco, tienes que enseñarle a pulsar”. Una vez asociado este concepto se comenzaría con las palabras grabadas en cada uno de los pulsadores, eso sí, de uno en uno. “Para el botón de comer se pulsaría el botón de comer y después se le daría de comer”.

A pesar de que Nuria haga cambios en los botones, Bran ya es capaz de identificarlos rápidamente. Si escucha que su familia está hablando de algo, es capaz de entender la conversación y acudir al panel para afirmar que quiere hacer eso.