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Cómo se organiza el Sorteo de la Lotería de Navidad: un vistazo tras bambalinas

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Colocados los bombos para el Sorteo Extraordinario de Navidad / Teatro Real de Madrid

22 de diciembre, 9.00 horas de la mañana. Millones de españoles tienen la mente puesta ya en dicha fecha y hora. Es el momento en el que dará comienzo el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad 2024. Por delante unas cuatro horas de nervios y tensión concentradas en el Teatro Real de Madrid, en los hogares, oficinas, bares y vehículos desde los que se suele seguir este tradicional evento.

Son cuatro horas que se pueden hacer eternas, si al Gordo le da por ponerse perezoso, como el año pasado que salío pasadas las 13.00 horas, o frenéticas si los niños de San Ildefonso se empeñan en cantarlo (y contarlo) todo en cuestión de una horita y media.

Sea como sea, la guía completa sobre el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad 2024 cristaliza en esas voces infantiles y las celebraciones al comprobar que te ha tocado algo (aunque sea una pedrea), pero tiene mucha plancha que ni se ve niu se escucha en directo. Como las colas que hacen los consumidores para conseguir el décimo que desean, los rituales de cada año para llamar a la suerte o ¿Cómo se organiza el Sorteo de Navidad? Aquí un vistazo tras bambalinas.

Porque los preparativos del sorteo navideño empiezan meses antes. Los niños de San Ildefonso llevan ensayando desde el mes de octubre, dos veces por semana, y el día antes del gran día realizan un ensayo general en el Teatro Real, donde ya se encuentran los verdaderos protagonistas de la cita: los bombos, las bolas, la tolva y el resto de elementos que pasarán su pertinente revista oficial a cargo de los responsables de Loterías y Apuestas del Estado. Y cuando está todo en orden se cierra la instalación a cal y canto hasta la mañana siguiente.

Los bombos y los premios

Esa noche previa en la que millones de españoles sueñan con que le cambie la vida a lo largo de la mañana siguiente es el preludio de un protocolo que se escapa a la vista de (casi) todos. Sólo unos escasos privilegiados pueden contemplar cómo abren las puertas del salón al público, se constituye la mesa que preside y los trabajadores de Loterías y Apuestas del Estado introducen manualmente, las bolas en la tolva. Lira por lira. Comprobando que ninguna se queda atrás y llevándolas al bombo que les corresponda.

Porque en el bombo más grande se colocan los números y en el más pequeño, los premios...excepto los premios más grandes del sorteo (desde los quintos premios hasta el premio Gordo), que sí se enseñan a la mesa y a las cámaras antes de ser introducidos directamente de la lira al bombo. Sólo entonces llega el momento de que giren los bombos y de que el corazón del público (y los que lo siguen desde cualquier sitio) empiece a acelerarse. Ahora sí, la suerte está echada. Entran en escena los niños de San Ildefonso, que suelen desayunar previamente en las mismas instalaciones del Teatro Real, y sobre las 9:15 horas, aproximadamente, cuatro de ellos se quedan en el escenario mientras el resto espera su turno imaginando que quizás, sólo quizás, sea él el que cante el Gordo de la Lotería de la Navidad, el premio más deseado del año por los españoles.

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