Sueños esféricos
Juan Antonio Solís
Nadie en el mundo más afortunado que Víctor Orta
Sevilla/La regulación municipal de los patinetes eléctricos en la ciudad sigue en el aire a la espera de la norma específica para los vehículos de movilidad personal (vmp) que el Ayuntamiento aprobó provisionalmente en marzo y supone la modificación de la ordenanza de circulación de 2014.
A pesar de este vacío normativo que se mantiene desde hace cinco meses sin fecha cierta sobre su resolución, en agosto comenzó a operar la compañía Lime con sus patinetes eléctricos tricolor (verde, blanco y negro) con el compromiso de aparcarlos en parkings privados y la prohibición de dejarlos en la vía pública.
La realidad, sin embargo, es que tal requisito no se está cumpliento en algunos casos. Se pueden ver aparcados en todas partes, incluso en lugares del todo inadecuados. Para evitarlo el Ayuntamiento ha ordenado a la Policía Local que empiece a multar cualquier tipo de patinete que vea aparcado en la calle. Hasta el momento se han puesto al menos una decena de multas de 200 euros de sanción.
Según el área de Movilidad, desde el 19 de agosto “la Policía Local tiene instrucciones precisas de multar y retirar los patinetes eléctricos de cualquier empresa o particular aparcados sin permiso en la vía pública”.
En el caso de la empresa Lime, Movilidad asegura que “dado que no tiene autorización alguna para realizar en la ciudad un servicio de movilidad compartida en patinetes eléctricos, son susceptibles de multa en caso de que aparquen indebidamente en la vía pública, en cumplimiento de la ordenanza de circulación de 2014” (BOP 206).
Junto con las sanciones por estacionamiento indebido, la Policía Local está procediendo a retirar zonas de aparcamiento no legalizadas e instaladas en la vía pública por parte de empresas de alquiler de estos vehículos de movilidad personal.
Sorprende la respuesta de la compañía Lime a la proliferación de patinetes suyos que se quedan en la vía pública. Álvaro Salvat, director general de Lime, responsabiliza a los usuarios directamente. “El despliegue de los patinetes en la ciudad no contempla su aparcamiento en la vía pública. Somos plenamente conscientes de que no todos los usuarios son lo suficientemente diligentes en este sentido, a pesar de las indicaciones realizadas por la compañía a través de la aplicación móvil”, afirmó Salvat en declaraciones a este periódico.
Según la empresa, cuenta con un equipo de personas que “monitoriza, de forma permanente, las calles de la ciudad para tratar de subsanar de inmediato este tipo de comportamientos y evitar cualquier posible molestia a peatones y vecinos”. Pero es evidente que no les está funcionando bien tal opción.
Lime tiene la obligación de registrar sus patinetes, como marca el Ayuntamiento, si bien no lo harán hasta que se apruebe la nueva ordenanza municipal. “Estamos a la espera de que quede aprobada la nueva regulación para poder registrarlos. En cuanto esté aprobada la nueva regulación, así lo haremos de acuerdo con las instrucciones pertinentes”, recalcan.
A la pregunta de por qué operan sin tener ordenanza aprobada, Lime afirma que es “una fórmula habitual en el sector que no conlleva autorización municipal previa” hacerlo por “acuerdos con establecimientos privados para conformar una red de puntos de recogida/entrega de patinetes”.
El Ayuntamiento no da fecha de la entrada en vigor de la norma de patinetes eléctricos. El texto está en fase de respuesta a las alegaciones y cuando se respondan se aprobará definitivamente en el pleno. En realidad el Ayuntamiento aguarda la normativa estatal de la DGT, paralizada también por falta de Gobierno.
Temas relacionados
También te puede interesar
Lo último
27 Comentarios