La nueva presidenta del Supremo dejó un "magnífico recuerdo" en Sevilla, donde estuvo destinada en la Expo

La magistrada María Isabel Perelló Doménech, que desde este miércoles ha hecho historia en la Justicia española al convertirse en la primera mujer que preside el Tribunal Supremo y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), dejó un "magnífico recuerdo" en Sevilla, ciudad en la que estuvo destinada durante la Exposición Universal de 1992.

Así lo ha explicado a este periódico el que fuera presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en Sevilla Antonio Moreno Andrade, quien ha destacado de Isabel Perelló su carácter de "persona dialogante y dada al consenso".

Moreno Andrade, que actualmente desempeña el puesto de Of Counsel en el bufete NERTIS ETL Global, coincidió con Isabel Perelló en los años 1991 y 1992, cuando la magistrada estuvo destinada en la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJA en Sevilla. "Dejó un magnífico recuerdo en Sevilla y la mayoría de los que compartimos aquellos años con ella conservamos su amistad", ha añadido el magistrado, ya jubilado.

Preguntado por el hecho de que Perelló se haya convertido en la primera mujer en presidir el Tribunal Supremo y el máximo órgano de gobierno de los jueces por primera vez desde la creación del Alto Tribunal en 1812, Moreno Andrade ha indicado que desde un punto de vista personal "le da igual que una mujer o un hombre presida" el tribunal, puesto que no ha existido "diferencias en las Salas del TSJA de Sevilla, donde hay dos mujeres al frente de la mismas". Es algo "para mí indiferente", ha agregado.

La elección de la magistrada progresista Isabel Perelló como presidenta del Alto Tribunal y del CGPJ se produjo al lograr 16 apoyos entre los vocales del órgano de gobierno, frente a los cuatro recibidos por la también magistrada del Tribunal Supremo Ana María Ferrer García.

Isabel Perelló, que será la primera mujer en ocupar la presidencia del alto tribunal desde la creación de este órgano judicial en 1812, fue designada magistrada de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo en 2009. Miembro de la Carrera Judicial desde 1985, ha ocupado destinos en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Mahón (Menorca) y en la Audiencia Provincial de Barcelona.

Magistrada especialista de lo contencioso-administrativo desde 1991, ha servido en la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía con sede en Sevilla (1991-1992) y en la de la Audiencia Nacional (1993-1994 y 2001-2009). También ha sido letrada en el Tribunal Constitucional (1994-2001).

Como magistrada de la Sala Tercera del Tribunal Supremo ha dictado sentencias en materias atribuidas a su sección tercera, como competencia, instalaciones de energías renovables, regulación eléctrica, órganos reguladores, contratos administrativos y seguridad social, entre otras.

Ha participado en diversos cursos, tanto dentro como fuera de España, sobre derecho constitucional, derecho administrativo comparado, telecomunicaciones y jurisprudencia constitucional, así como en encuentros organizados por el Consejo General del Poder Judicial y por la Diputación de Barcelona sobre derecho del deporte, derecho sancionador o autonomía local, entre otras materias.

Es coautora de varias obras y ha colaborado en el libro “La Europa de los Derechos: el Convenio Europeo de los Derechos Humanos”, editado por el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales.