La mayoría de los usuarios del servicio de atención a víctimas: mujer soltera, entre 30 y 44 años

Según ha informado la Consejería de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local el perfil medio del usuario del SAVA (Servicio de Atención a Víctimas) es una mujer de entre 30 y 44 años, soltera, con estudios primarios, en situación de desempleo, con domicilio en una capital de provincia, que ha sufrido un delito de maltrato o contra la integridad moral y cuya relación con el autor del delito es de ex pareja.

El perfil medio de los acusados es el de un hombre, también de entre 30 y 44 años, ya que el 92 % de los presuntos autores del delito que motiva la asistencia al SAVA son hombres.

El 79,3 % de las personas que acudieron al SAVA acabaron interponiendo una denuncia por los hechos que motivaron su asistencia, mientras que el 16 % decidió no hacerlo tras recibir la información de los profesionales, y el 4,5 % optó por retirarla.

Asimismo, en las dependencias del SAVA de las ocho provincias andaluzas se ha atendido a un total de 493 menores de edad, 344 niñas y 149 niños, como víctimas también de delitos.

Durante los seis primeros meses del año pasado se beneficiaron de este servicio en la comunidad andaluza un total de 4.223 personas, aunque en total 6.800 fueron atendidas si se suman las personas que en algún momento solicitaron algún tipo de información.

La Consejería ha puesto en marcha una campaña en redes sociales para difundir y acercar a la ciudadanía las prestaciones que ofrece el Servicio de Atención a Víctimas en Andalucía (SAVA), con un presupuesto de 15.000 euros.

Bajo el lema Porque con SAVA, lo sabes se trata de divulgar un servicio que ofrece asesoramiento, asistencia y acompañamiento a las víctimas de cualquier acción delictiva, en todas las fases del proceso judicial.

La campaña se va a desarrollar hasta el 17 de enero en Instagram, Facebook, Youtube y Spotify para acercar a la ciudadanía este recurso que es completamente gratuito gracias a las más de 500.000 visualizaciones que se espera alcanzar.

La campaña consiste en una serie de vídeos en los que se recrean distintas situaciones en las que una persona se puede ver envuelta tras sufrir algún tipo de delito y cuyas dudas pueden ser resueltas en el SAVA a través de sus propios profesionales o bien derivando a los organismos pertinentes