La Fiscalía pide 12 años por el crimen de un hombre que intentó robar la marihuana que cultivaban en una nave de La Algaba

Un jurado popular enjuiciará a partir del próximo día 18 de octubre en la Audiencia Provincial de Sevilla a tres acusados de matar en el año 2019 a un hombre que entró en una antigua nave para maquinaria agrícola y aperos ubicada en la localidad de La Algaba con la intención de robar las plantaciones de marihuana que allí cultivaban los investigados. De este modo, el juicio comenzará el día 18 de octubre con la constitución del jurado popular, tras lo que el día 21 tendrán lugar la presentación de las alegaciones previas por las partes personadas y la declaración del acusado y de varios testigos, mientras que el día 22 comparecerán más testigos y el día 23 los peritos.

En su escrito de acusación, la Fiscalía reclama 12 años de prisión para el principal acusado como autor de un presunto delito de homicidio, así como seis años de cárcel para los otros dos investigados como cómplices de dicho delito. Asimismo, y en concepto de responsabilidad civil, solicita que el principal acusado indemnice con 70.000 euros a la madre del fallecido, con responsabilidad subsidiaria de los otros dos encausados.

El Ministerio Público relata en su escrito que los acusados se dedicaban en enero de 2019 al cultivo de plantaciones de marihuana en una antigua nave anexa a una vivienda en La Algaba, donde residía uno de los acusados, “con finalidad de destinarla al mercado ilícito”, unos cultivos que eran conocidos por un grupo de personas de la provincia de Málaga que “decidieron apoderarse de la marihuana”, para lo cual se desplazaron hasta dicho lugar el día 12 de enero de 2019, “acordando para el éxito de tal propósito proveerse” de dos pistolas.

La Fiscalía precisa que todos ellos llegaron antes de la medianoche a las inmediaciones de la vivienda, donde, “tras vigilancia, estudio del terreno y asegurarse el asalto sin testigos o interferencias de terceros”, decidieron entrar sobre las 1,00 horas por la finca colindante, cortando la valla que la circundaba para acceder al tejado de la casa y posteriormente al patio de la vivienda del encausado.

Una vez allí, varios de ellos golpearon la puerta de entrada con gritos de “policía, policía... abran la puerta o la volamos a tiros”, mientras que otros se adentraron en la nave contigua, donde “hallan marihuana ya cortada y seca que guardan en cajas y bolsas para llevárselas”, todo ello hasta que “comienzan a escuchar a los moradores de la vivienda”.

Una puñalada en el costado

El Ministerio Público relata que el acusado propietario de la vivienda, “alertado y asustado por las voces y ruidos”, les gritó para intimidarles al tiempo que, con una carabina, disparó al tejado donde se encontraban algunos de los asaltantes, mientras que, ante tal situación, también pidió ayuda a sus socios en el negocio “ilícito”, a los que llamó por teléfono.

Seguidamente, y según el escrito de acusación del fiscal, éstos últimos se desplazaron hasta la vivienda “provistos de cuchillos y palos, gritando y amenazando a los asaltantes, provocando que abandonaran la vivienda y la nave por los tejados hacia la parte trasera”, logrando algunos de ellos saltar a un campo de cultivo “cargando las cajas preparadas con marihuana cortada”, tras lo que se escondieron en una zona de zarzas y matorrales colindantes con la ribera del río Guadalquivir.

La Fiscalía agrega que los asaltantes fueron perseguidos por los acusados, quienes localizaron a uno de ellos, momento en el que el principal encausado, “aprovechándose de su superioridad numérica e intimidatoria por la presencia del resto de los acusados”, le gritó “violentamente”, “encarándose” con una pistola la víctima, de 20 años de edad.

En ese momento, y según el Ministerio Público, el principal investigado lo apuñaló presuntamente en el costado izquierdo con un cuchillo de grandes dimensiones que portaba, cayendo la víctima al suelo con una fuerte hemorragia y falleciendo a las 3,00 horas del día 13 de enero de 2019. 

Tras la agresión, los investigados huyeron “rápidamente” del lugar, dejando gravemente herida a la víctima, que fue socorrida por sus amigos aunque falleció “a los pocos segundos”, por lo que éstos acudieron a la Guardia Civil a pedir auxilio, compareciendo los agentes en el lugar de los hechos y comprobando el fallecimiento, lo que fue comunicado al Juzgado de Guardia.

Por los delitos contra la salud pública, tenencia ilícita de armas y robo con violencia o intimidación se acordó la deducción de testimonio y, por tanto, dichos delitos son conocidos en otro procedimiento distinto.