Piden 18 años al “Ivi” por intentar asesinar a un hombre al que iban a tirar al río

La Fiscalía de Sevilla ha pedido 12 años de cárcel, y la acusación particular 18 años, para tres miembros de la banda del Ivi por intento de asesinato de un hombre al que dejaron paralítico y al que pensaban tirar al río aprovechando que estaba inconsciente.

El agredido quedó paralítico de las dos piernas, por lo que la Fiscalía añade para él una indemnización de 114.242 euros y la abogada Ofelia Liñán, que ejerce la acusación particular, un millón de euros con pago subsidiario por parte de la dueña de la discoteca donde ocurrieron los hechos.

La agresión se produjo sobre las 7 de la mañana del 27 de enero de 2019, cuando Israel G.M. se encontraba en el interior de la discoteca “La Latina” de la calle Cartografía y al darse la vuelta desde la barra tropezó con el procesado Francisco Javier P.O. y le tiró la copa que portaba.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, al que tuvo acceso este periódico, se entabló entonces una fuerte discusión entre ambos en cuyo transcurso intervino el acusado Iván H.P., alias Ivi, de 31 años, amigo de Francisco Javier, que propinó una bofetada a Israel. En ese instante se unió a ellos el también acusado José Luis P.C., familiar de Iván, que en aquel momento ejercía como portero de la discoteca y por ello tenía una defensa metálica extensible, con la que golpeó a Israel. Con ayuda de los otros dos consiguió a empellones sacarlo del establecimiento, donde “guiados del propósito de acabar con la vida de Israel, comenzaron a golpearlo, José Luis con la defensa extendida en la cabeza y el costado, y Francisco Javier e Iván a puñetazos y patadas.

Añade el relato que, al tratar de refugiarse Israel dentro de la discoteca, Francisco Javier le asestó por detrás cuatro puñaladas con un arma blanca que no ha sido localizada, y al caer Israel al suelo siguieron golpeándolo hasta que se desvaneció.

Entonces acercaron un vehículo a la puerta de la discoteca e introdujeron a la víctima en el maletero “con el propósito de arrojarlo al río Guadalquivir aprovechando que se encontraba desvanecido”, pero Israel recuperó la conciencia y “comenzó a dar golpes desde dentro del habitáculo”, lo que hizo que las muchas personas presentes les obligaran a desistir de su propósito.

Finalmente, José Luis P.C., a instancias de la dueña de la discoteca, introdujo a Israel en un vehículo y lo trasladó a un centro de salud, desde donde fue derivado a la UCI del hospital Virgen Macarena.

“Abandonado a su suerte” tras el “macabro objetivo” de tirarlo al rio

La Fiscalía solicita para cada procesado 12 años de prisión y el pago de una indemnización de 9.491 euros por las lesiones y 104.751 por las secuelas. Pero la acusación particular eleva su petición a 18 años de cárcel por un delito de asesinato alevoso y con ensañamiento en concurso con otros dos de lesiones graves e invalidantes.

En su calificación de los hechos -previo al juicio que celebrará la Audiencia de Sevilla- la acusación particular indica que los acusados no consiguieron su macabro objetivo de tirarlo al río “debido únicamente a la presión e intervención efectiva de todos los testigos allí presentes”.

Pero a continuación “le dejaron abandonado a su suerte” en el centro de salud, desde donde acto seguido fue trasladado de urgencia a la UCI del Virgen Macarena.

Las lesiones “han afectado de manera irreversible a la médula espinal” de la víctima, que “ha perdido la movilidad de las dos piernas y presenta graves secuelas psicológicas”, por lo que eleva su petición de indemnización a un millón de euros, siendo responsable civil subsidiaria la dueña de la discoteca.