Caso Marta del Castillo: El Cuco mintió y reconoce 13 años después que estuvo en el piso de León XIII tras el crimen de Marta
El joven, que ahora tiene 29 años, admite los cargos por haber prestado un testimonio falso en el juicio a Miguel Carcaño
Las sorpresas en el juicio por falso testimonio al Cuco y su madre
Nuevo y sorprendente giro en el caso Marta del Castillo. Javier García Marín, el Cuco, ha reconocido este jueves que en 2011 mintió cuando declaró como testigo en el juicio a Miguel Carcaño por el asesinato de la joven, hechos por los que ahora se enfrentan él y su madre, Rosalía García Marín, a una petición de entre ocho meses y dos años de cárcel por un delito de falso testimonio.
En la vista oral que ha comenzado en el juzgado de lo Penal número 7 de Sevilla y una vez que se ha leído el escrito de acusación de la Fiscalía, el Cuco ha reconocido los hechos que se le atribuyen y ha añadido que no tiene nada más que decir. Sus palabras ante el tribunal han sido: "Estoy de acuerdo con esos hechos pero no voy a responder a las preguntas".
Su madre, Rosalía García Marín, también ha reconocido los hechos y se ha negado a contestar a las preguntas, y a continuación, la juez Olga Cecilia Simón, ante el reconocimiento expreso de los hechos, ha considerado que no era necesario que se continúe con la práctica de las pruebas y documentales propuestas, entre ellas la declaración de Miguel Carcaño, que había sido trasladado expresamente desde la cárcel de Herrera de la Mancha (Ciudad Real) para prestar declaración en este juicio. "Este pleito se queda sin pruebas tras el reconocimiento" de los hechos, ha manifestado la magistrada.
La protesta de la abogada de los padres de Marta, Inmaculada Torres, ha llevado a la juez a permitir la declaración de los padres, Antonio del Castillo y Eva Casanueva, a los efectos de valorar los "daños morales" que las mentiras del Cuco y su madre les han causado, y por los que reclaman una indemnización de 20.000 euros. Pero salvo la declaración de los padres, que tendrá lugar mañana, no declararán más testigos ni se oirán las grabaciones que el supuesto infiltrado en el entorno del Cuco realizó.
Tras la declaración de los padres, las acusaciones tendrán que decidir si elevan o modifican sus conclusiones provisionales, y se expondrán los informes de conclusiones, con lo que el juicio quedará visto para sentencia mañana.
Lo que ha reconocido el Cuco
Con su declaración en el juicio, el Cuco admite que no dijo la verdad cuando rindió testimonio ante el tribunal, lo que ha generado una gran expectación en la Sala donde se celebra el juicio, una sorpresa relacionada con su testimonio que ya adelantó este periódico que se produciría.
El acusado, que ahora tiene 29 años, ha reconocido por primera vez en trece años que en la tarde del 24 de enero de 2009 estuvo en el piso de León XIII, donde fue asesinada Marta, tal y como recoge la sentencia del juzgado de Menores que lo condenó por encubrir el asesinato.
El Cuco y su madre están acusados precisamente de haber "urdido un plan para engañar" al tribunal que juzgó a Miguel Carcaño y a los otros adultos. La Fiscalía sostiene en el escrito de acusación que ha sido reconocido por el acusado que el 25 de octubre de 2011, el Cuco y su madre -junto a su padre, ya fallecido- "concertaron con carácter previo una declaración concordante y coherente a fin de dar cobertura a la actuación de Javier durante la noche y la madrugada del 24 de enero de 2009 -cuando se produjo el crimen-, a sabiendas de que se faltaba a la verdad y sin importarles los perjuicios que ello podía irrogar para la familia de la fallecida Marta del Castillo".
El Ministerio Público relata asimismo que en esa declaración en el juicio, el que fuera menor cuando se cometió el crimen afirmó que "no había estado en el domicilio" de la Calle León XIII, donde se produjo el asesinato de la joven, sino que estuvo con varios amigos "en franjas horarias distintas a las reales, marchándose a su domicilio sobre las 23:30 horas, donde se encontró" con su padre que había salido a tirar la basura, para a continuación "subir hasta su casa y no salir más". Sin embargo, prosigue la Fiscalía, "la verdad era muy diferente conforme ha quedado acreditado" en las sentencias del juzgado de Menores y de la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla.
La sentencia del juzgado de Menores declaró como hechos probados que Miguel Carcaño llamó al Cuco tras haber dado muerte a Marta y el entonces menor, acompañado de Samuel Benítez cogieron el Volkswagen Polo propiedad de la madre del Cuco para desplazarse al domicilio de León XIII, donde según esta sentencia también estaba el hermano de Miguel, Javier Delgado, a quien la Audiencia ha descartado volver a investigar.
A continuación, prosigue la sentencia del juzgado de Menores, sacaron en una silla de ruedas el cuerpo de la joven, ya en la madrugada del 25 de enero de 2009. El Cuco y Samuel, en el coche, y Carcaño en una motocicleta, llevaron el cuerpo hasta un lugar "no determinado y dando al mismo un destino que a día de hoy se ignora completamente", concluía el fallo, que lo condenó a tres años de internamiento como encubridor del asesinato de Marta.
En 2011 negó en el juicio que hubiese estado en el piso de León XIII
En su declaración en el juicio de los acusados mayores de edad, en el año 2011, el Cuco había reiterado que en la tarde-noche del 24 de enero de 2009 y en la madrugada del día siguiente no estuvo en el piso de León XIII donde se produjo el crimen. En aquella declaración, que tuvo lugar el 25 de octubre de 2011, Francisco Javier García Marín sostuvo que esa tarde estuvo de botellona con sus amigos pero no había quedado en verse con Marta ni Miguel. El Cuco reconoció que llamó a Samuel Benítez desde una cabina, sobre las 21:30 horas, y éste le dijo que estaba en Pino Montano.
Según Javier García Marín, se marchó sobre las 23:30 horas "a dormir la mona" a su casa, a la que llegó sobre las doce o doce y media de la noche, tras haberse encontrado con su padre, que iba a tirar la basura en ese momento y que le dijo que se fuera para la vivienda. En esa declaración, el joven reiteró que implicó al hermano de Miguel Carcaño en los hechos por las "presiones" de la Policía, que "dirigió" su declaración, y porque Miguel lo había incriminado a él con anterioridad.
El Cuco volvió a señalar entonces a Carcaño como el único que conoce dónde está el cuerpo de Marta, a pesar de que el juez de Menores que lo condenó a él por un delito de encubrimiento mostró su "plena convicción" de que él también sabe el paradero de Marta.
El momento culminante de la declaración en el juicio celebrado en 2011 se produjo cuando el abogado José María Calero, que ejercía entonces la acusación particular en representación de los padres de Marta le hizo la siguiente pregunta:
-Como conoce usted a Samuel y a personas que tienen relación con lo que le ha pasado a Marta y ya ha pasado su juicio, ¿quiere usted hacer el favor de decirnos al tribunal y para que puedan descansar los padres tranquilamente algún dato para poder encontrar a Marta?
-Si yo lo supiera ya se lo hubiera dicho hace tiempo, y si lo quieren saber pregúntenselo a él [en alusión a Miguel].
En ese momento del interrogatorio, el presidente de la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla, el magistrado Javier González, recriminó al Cuco, por el tono que había empleado, diciéndole que "eso último sobra".
-¿Quién dice usted que lo puede saber? -insistió el letrado.
-Miguel. -respondió el Cuco.
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