La Audiencia deja libre a una de las acusadas del "crimen de las cuñadas"
Crimen de La Rinconada
La excarcelación se produce después de que una testigo protegido negase rotundamente su participación
El caso da un giro espectacular y la Fiscalía pide que se vuelva a investigar
Un vuelco a la investigación del asesinado de Anabel Deza Vázquez, la joven fue asesinada de 61 puñaladas el 19 de abril de 2016 en su domicilio de La Rinconada. La Audiencia de Sevilla ha dejado en libertad a Elena N. S., una de las tres sospechosas que llevaban más de dos años en prisión provisional, después de que una testigo protegido negase rotundamente la participación de esta acusada en el crimen, en el transcurso de una rueda de reconocimiento practicada el pasado 5 de julio a instancias de su abogado defensor, Enrique Rojo.
Una vez practicada esa rueda de reconocimiento, ni la Fiscalía de Sevilla ni la Junta de Andalucía, personada como acusación particular en la causa, se opusieron a la puesta en libertad de la joven, que abandonó la cárcel el martes. Es más, la Junta consideró que tras esa prueba estaba justificado que se decretase la puesta en libertad, siempre y cuando Elena N. reiterara el contenido de una carta mecanografiada enviada supuestamente por la acusada –para lo cual la Junta pedía que firmara dicha carta– y en la que explicaba cómo habían ocurrido los hechos.
La causa contra los tres acusados –junto a Elena fueron procesadas su hermana Rosa y el novio de ésta, Francisco Javier M. R.– estaba ya en la Audiencia de Sevilla, donde iba a ser enjuiciada por un jurado popular que iba a ser presidido por la magistrada de la Sección Séptima Esperanza Jiménez Mantecón, quien el pasado martes dictó el auto de libertad de Elena N., quien no obstante sigue investigada en la causa y deberá comparecer en el juzgado dos veces al mes. En el auto, la magistrada recuerda que en este caso “ni existe acusación que interese el mantenimiento de la medida cautelar ni resultaría adecuado a la vista del giro que la causa ha tomado mantener a Elena N. en prisión, lo que ha de llevara que se modifique la medida, si bien, siendo aún acusada”, su libertad va acompañada de esa obligación de comparecer regularmente en el juzgado.
La Audiencia rechaza asimismo supeditar la libertad provisional a la firma de una carta que en su día mandó la acusada al órgano judicial, puesto que “las causas que deben motivar la decisión están en única y directa relación con las circunstancias que afecten propiamente a la afectada”.
El tribunal recuerda en el auto que Elena N. llevaba en prisión desde el 23 de abril de 2016 y que dicha situación fue prorrogada en marzo pasado, con lo que llevaba más de dos años privada de libertad. El auto destaca precisamente que la joven no fue identificada en la rueda de reconocimiento fotográfico y que ninguna de las acusaciones se ha opuesto a su salida de prisión.
De hecho, el fiscal del caso, Gabriel González, ha pedido que los autos sean devueltos al juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla “dados los nuevos elementos surgidos tras la práctica del reconocimiento, siendo relevantes para la instrucción de la causa y alterando el curso de la misma”.
Dice el representante del Ministerio Público que es preciso que la causa vuelva a instrucción para “acomodar las actuaciones a las circunstancias nuevas, lo que implica la necesidad de retrotraer las actuaciones a fin de proceder a la declaración de la nulidad parcial de aquellas resoluciones que supusieron la continuación contra los actuales tres investigados, siendo en sede instrucción donde se deberá valorar la apertura de una nueva línea de investigación, previo traslado a las partes personadas para que informe sobre el momento de retroacción de actuaciones”, según precisa el fiscal en un escrito dirigido al tribunal del jurado, al que tuvo acceso este periódico.
La Fiscalía de Sevilla había reclamado una condena de 25 años de prisión para los tres acusados, al considerar que sometieron a la víctima, madre de cuatro hijos, a una “brutal, despiadada y repetida paliza” y le infligieron un “grave martirio”.
La defensa pedirá en el juzgado que se archive la causa contra Elena Navarro
El abogado Enrique Rojo Alonso de Caso, que defiende a Elena N., anunció ayer que va a instar el sobreseimiento del proceso contra esta joven en cuanto la causa se reciba en el juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla, ya que siempre ha confiado en la inocencia de esta joven, que había negado desde el principio su participación en el crimen y había alegado que la mañana de autos se hallaba “trabajando” en el servicio municipal de limpieza de la localidad.
La Guardia Civil llegó incluso a abrir una nueva línea de investigación en la que buscó la participación de una cuarta persona en el asesinato de Anabel Deza, realizándose incluso pruebas de ADN que descartaron la implicación de otras dos cuñadas de la víctima.
El abogado de Elena recordó ayer que ésta se encuentra en libertad provisional desde el pasado martes, en virtud de la resolución dictada por el Tribunal del Jurado, que ha acordado su excarcelación sin necesidad de prestar fianza alguna.
La joven ingresó en prisión en el mes de abril del año 2016, al ser reconocida fotográficamente por una testigo protegido como una de las personas que entró en el domicilio de la fallecida y salió pocos minutos después de su muerte, en la mañana del 19 de abril de ese año. Desde el primer momento la defensa solicitó una rueda de reconocimiento que fue reiterada en varias ocasiones y finalmente admitida por el Tribunal del Jurado.
La rueda, efectuada la pasada semana, resultó negativa para la identificación de Elena, y nada más conocerse el resultado el letrado Enrique Rojo solicitó la inmediata puesta en libertad de la acusada, reconociendo el auto de libertad que, como consecuencia del resultado de la rueda, los indicios que en un primer momento se valoraron, “habían decaído por completo y no habían sido corroborados por el resultado de la diligencia de reconocimiento en rueda”, concluyó.
1 Comentario