La recusación a la juez Alaya se queda para septiembre

La recusación planteada contra la juez Mercedes Alaya para apartarla de uno de los sumarios de Invercaria se queda para septiembre. La Sección Séptima de la Audiencia -a la que pertenece la magistrada- ha paralizado el trámite porque uno de los dos procesados que la recusa no ha aportado el poder notarial necesario para estos casos.

La recusación fue planteada por el ex consejero de la Junta Francisco Vallejo, quien argumenta que las declaraciones públicas de Alaya reflejan su “antipatía y animadversión” al PSOE y le han hecho perder la “apariencia de imparcialidad” que debe tener todo juez para juzgar un caso.

De los otros cinco empresarios procesado por las ayudas de Invercaria a Servivation (una empresa del Parque Tecnológico de Málaga), solo uno de ellos se ha adherido a la recusación planteada por Vallejo y ahora el tribunal ha paralizado el trámite hasta que aporte el necesario poder notarial.

Ni la Fiscalía Anticorrupción ni los restantes procesados han secundado la recusación de Vallejo, que está defendido en este caso por el Gabinete Jurídico de la Junta, para que la juez Mercedes Alaya sea apartada de juzgar este caso.

Los restantes cuatro abogados dejaron transcurrir los plazos sin pronunciarse y, en privado, afirmaron que los argumentos del ex consejero son estrictamente políticos, que la recusación no va a prosperar y que, en cambio, va a crear mal ambiente. En consecuencia, va a ser perjudicial para su defensa. Las causas de recusación “deben ser muy evidentes”, destacan estos letrados.

No se han adherido a la recusación los defensores de Tomás Pérez-Sauquillo, ex presidente de Invercaria, y de los vocales de Servivation Francisco Barrionuevo, Jesús Macías y Bienvenido Martínez.

La Fiscalía Anticorrupción tampoco apoya el incidente, que percibe como una serie de “deducciones y argumentaciones carentes de apoyo fáctico y probatorio”.

El único defensor que se ha adherido a la recusación no ha aportado nuevos argumentos y simplemente ha comunicado al tribunal que las causas le parecen “fundadas y la recusación es razonable”.

Vallejo entiende que las recientes manifestaciones públicas de Alaya, hechas de manera “libre y voluntaria”, reflejan una “pérdida de la necesaria apariencia de imparcialidad que impide que Su Señoría pueda enjuiciar la presente causa, siempre reiterando el máximo de los respetos que tenemos en la persona de la juzgadora”.

Alaya, como magistrada de la Sección Séptima de la Audiencia, fue designada ponente de este sumario de Invercaria que investigó el juez de Instrucción número 16, Juan Gutiérrez Casillas, y que se refiere a las ayudas a esta empresa del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) en Málaga. Aunque formará tribunal con otros dos magistrados, ella será la encargada de redactar la futura sentencia y la que ordenará el proceso.

Con todos los escritos en su poder, será la propia magistrada quien primero se pronuncie sobre su aceptación o no de la recusación. En caso de que rechace apartarse del caso, la recusación será turnada a un magistrado de la Audiencia como instructor, según un turno establecido al efecto, y otra sala emitirá la resolución definitiva.

Si esa sala ve motivos para apartar a Alaya, la Sección Séptima tendrá que constituir un nuevo tribunal de tres magistrados pero sin ella, que además podría quedar excluida de otras causas derivadas del caso Invercaria.