Acusados dos hermanos de Paradas por tener a un trabajador ilegalmente en su finca

Dos hermanos de Paradas, Manuel y Álvaro T. R., se enfrentan a cinco años de cárcel cada uno y sendas multas de 6.000 euros por tener a un trabajador en su finca, que además estaba en situación irregular en España, sin contrato de trabajo. El hombre, de nacionalidad colombiana, tuvo un accidente que no fue atendido correctamente al no querer darle asistencia sanitaria y perdió cuatro dedos del pie. La Fiscalía le imputa a los dos un delito contra el derecho de los trabajadores, otro de lesiones y un último de omisión del deber de socorro en un juicio que tiene previsto celebrar la Audiencia Provincial de Sevilla este lunes 5 de julio. Por el primero solicita una pena de tres años de cárcel y 3.000 euros de multa; por el segundo, dos años de prisión y 3.000 euros de multa; y 12 meses de prisión por el tercero.

Según el Ministerio Público, en 2015 la víctima, de nacionalidad colombiana y en situación irregular, comenzó a trabajar en la finca de los hermanos acusados. Ellos le ofrecieron empleo como operario "a cambio de regularización su situación", "aun cuando sin la intención real de hacerlo". El hombre tenía sus cosas en un container dentro del campo, mientras que dormía "en un carro donde acarreaban a los animales" cercano al contenedor.

Los acusados no formalizaron contrato de trabajo alguno ni le dieron el alta en la Seguridad Social, "ni tenía horario de trabajo alguno". Cobraba por su trabajo 600 euros y nunca se le dio ningún tipo de formación en materia de riesgos laborales.

A finales de mayo 2015 uno de los hermanos tiró un cepo-trampa por encima de una verja, sin advertírselo al trabajador. Al quedarse tapada con paja, no se veía y la pisó cuando fue a quitar las alpacas viejas por indicación de los acusados, causándole una herida "de cierta gravedad". Manuel T. le sacó el clavo "e intentó coser" la herida porque "se negaba a llevarlo a curarse a un centro sanitario ante la ausencia de documentación" del trabajador herido. Al día siguiente y tras empeorar la herida, lo llevaron a un centro médico, aunque Manuel le advirtió que no contara cómo había sido el accidente. "A consecuencia del retraso en la atención médica" el hombre perdió cuatro dedos del pie.

La Fiscalía señala que los acusados "carecían de cualquier tipo de planificación preventiva en materia de riesgos laborales y no tenían seguro de responsabilidad que cubriera los accidentes laborales"