La brecha entre los Alba aumenta en la fiesta de Luis y Amina

La puesta de largo por los 18 años de Luis y Amina Martínez de Irujo ha aumentado más las tensiones que se viven en el seno de la Casa de Alba. De hecho, la única invitada con el apellido Alba que asistió a la fiesta, celebrada el fin de semana en el palacio Arbaizenea de San Sebastián, fue Tana Rivera Martínez de Irujo, hija de Francisco Rivera y Eugenia.

A la última gran celebración de la jet set este verano finalmente no acudieron, pese a haber confirmado su asistencia, ni Eugenia ni Fernando Martínez de Irujo, hermanos de Cayetano. A quien ni siquiera se esperaba era a Carlos, actual duque de Alba, al que Cayetano acusa de haberle echado de Dueñas tras la muerte de su madre y apartarle también de la gestión de las finanzas de la familia, como había sido el deseo de Cayetana de Alba.

Tantas ausencias y sinsabores entristecieron al padre de los mellizos protagonistas de la velada, pese a que su entrada en coche, en compañía de su novia, Bárbara Mirjan, manifestó que iban a pasárselo "muy bien".

Alfonso Díez, último marido de la duquesa, también estuvo en el cumpleaños. Con ello quiso mostrar su apoyo incondicional al duque de Arjona.

Victoria de Maricharlar, hija de la infanta Elena, fue la otra protagonista de la velada.

La cena estuvo servida por Mahercatering, una empresa con un estilo innovador y vanguardista. Tras el cóctel y la cena hubo música, con la actuación en directo de Trapical Mind, un grupo de trap, y después el Dj Óscar Martínez. Tanto Genoveva Casanova como su hija Amina vistieron modelos de la firma catalana Tot Hom. Por su lado, Luis Martínez de Irujo, un joven rubio con aires de príncipe austriaco, eligió un traje del sastre Daniel Sánchez Caro y camisa de Mirto, el camisero elegido por Don Juan Carlos y el Rey Felipe VI desde hace 30 años.

Según fuentes cercanas a Cayetano y a sus hijos, no hay exclusiva de la fiesta, un reportaje por el que las revistas del corazón habrían pagado una jugosa suma.