El beso que nos recuerda (y mucho) al de Sara Carbonero e Iker

No todo fue deporte y música en la final de Super Bowl. Sí, este año los Tampa Bay Buccaneers ganaron a los Kansas City Chiefs y la estrella del partido fue, una vez más, Tom BradyTom Brady, el marido de la modelo Gisele Bündchen que escribía una página dorada al ganar su séptima Super Bowl. En el evento no faltaron la top y los tres hijos de la pareja, quienes apoyaron al jugador con todas sus fuerzas desde las gradas.

Una vez concluido el encuentro, Gisele no dudó en bajar al terreno de juego para celebrarlo con su chico. Y ahí fue cuando se marcaron un momentazo: la pareja se besó apasionadamente delante de los fotógrafos.

La estampa nos recuerda, y mucho, a otro hito estelar relacionado con el deporte (en este caso español) y el amor: el beso de Iker y Sara Carbonero tras ganar la Selección española el Mundial en 2010.

La romántica imagen se hizo enseguida viral, al igual que hace diez años lo hubiera sido el comentado momento de Iker y Sara si hubieran existido las redes sociales. Aunque, en el caso de Bündchen y Brady, su relación es una de las más consolidadas ya del show bussiness, y hace una década Sara e Iker no estaban siquiera casados y no tenían todavía a sus dos hijos. Además, Sara trabajaba como periodista deportiva y el rendimiento y la concentración de Casillas fueron puestas en entredicho debido a la presencia cercana de su pareja.

La modelo y el considerado el mejor quarterback de la historia del fútbol americano tienen dos hijos también (un niño y una niña) y llevan 14 de relación.

Se conocieron en 2006 en la fiesta de un amigo en común. En ese momento, Tom salía con la actriz Bridget Moynahan. Su romance se hizo oficial en enero de 2007, pero dos meses después Bridget anunció que estaba esperando un hijo de él. Gisel contó tiempo después que en ese momento estuvo a punto de dejarlo con el quarterback.

Tras dos años de relación, en 2009 el jugador americano le propuso matrimonio a la modelo brasileña. Se casaron en una ceremonia muy íntima en febrero de 2009. Tardaron diez días en organizar la boda, en cuyo menú no faltó la típica parrillada americana, ni la tarta nupcial, ni el champán.

En diciembre de 2009, la pareja dio la bienvenid a su primer hijo, Benjamin Rein. Tres años después, en diciembre de 2012, nació una niña, Vivian Lake. En 2015 sonaron fuertes rumores de crisis, que Brady confirmó años después. Los problemas, al parecer, surgieron porque él estaba demasiado centrado en su carrera deportiva. No todo ha sido un camino de rosas, pero el amor ha logrado salir victorioso.

Hace dos años, en 2018, un beso de Gisele Bündchen consoló a Tom Brady tras perder aquella edición de la Super Bowl. Ahora, con el triunfo, también hay beso. Como en el amor, para lo malo y lo bueno.