Una tímida Carlota de Cambridge empieza el cole
Familia real inglesa
La hija del príncipe Guillermo y Catalina, de cuatro años, se incorpora al mismo centro que su hermano "muy ilusionada".
Muy tímida. Así se mostró la princesa Carlota, hija de los duques de Cambridge, en su primer día de colegio al ver que gran parte de la prensa británica esperaba expectante su llegada. A primera hora de la mañana del jueves, el príncipe Guillermo y su esposa Catalina llegaban al Thomas’s Battersea de Londres en compañía de sus dos hijos mayores. El príncipe Jorge miraba inquieto su colegio de la mano de su padre mientras que Carlota, de apenas cuatro años, sólo podía ver las decenas de fotógrafos que se encontraban frente a ella y no pudo evitar esconderse tras las faldas de su madre.
La duquesa de Cambridge estaba muy favorecida con un vestido rojo con estampado de flores y la melena suelta en un color algo más claro de lo habitual. Al ver la reacción de su hija, soltó una espontánea carcajada. Muchas emociones para un solo día y más cuando se trata de una hora tan temprana.
Después de conversar con ella en tono tranquilizador, la princesa Catalina invitó a Carlota a saludar a la prensa y, aunque al principio le costó, los fotógrafos pudieron captar finalmente a la princesa saludando con la mano y sonriendo, gestos de la niña que ya son de sobra conocidos por la prensa. Mientras, el príncipe Jorge miraba curioso todo el colegio al que regresa después del verano.
Guillermo de Inglaterra indicó a los periodistas allí congregados que la pequeña Carlota estaba "muy ilusionada" por tratarse de su "primer día".
Carlota y Jorge de Cambridge acuden desde el jueves juntos al mismo centro, el Thomas’s Battersea de Londres, un exclusivo colegio escogido especialmente por los duques a solo 30 minutos del palacio de Kensington y cuyo lema es "sé amable". Cuenta con una alta cuota de matrícula y es descrito como "feliz, dinámico y vibrante". Tanto que la propia directora fue la encargada de recibir a Jorge y Carlota de Cambridge en el patio para darles la bienvenida y acercarles al interior de las clases, donde pasaron su primer día rodeados de sus nuevos compañeros.
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