La aldaba
Carlos Navarro Antolín
Más allá de la voz de la Laura Gallego
La vida de la princesa de Gales ha corrido peligro debido a las consecuencias de la delicada operación quirúrgica a la que fue sometida el pasado día 16 de enero en The Clinic, la misma residencia donde se recupera el rey Carlos III de la operación de próstata a la que se sometió este pasado viernes.
El postoperatorio de Kate Middleton fue aún más dramático de lo que podía sospecharse y la princesa fue "intubada" y estuvo "en coma inducido" tras la operación. El palacio de Kensington se había limitado a informar que había pasado por el quirófano y que no se debía a un proceso canceroso pero se omitió todas las complicaciones vividas que ha detallado la periodista Concha Calleja en el programa Fiesta de Telecinco.
El príncipe Guillermo mostraba toda su contrariedad en las visitas al hospital londinense y la desazón en el entorno de la familia real era evidente. Los medios británicos venían señalando la preocupación por el estado de salud de la princesa Catalina. "Algo salió mal", advierte la periodista española sobre lo ocurrido tras pasar por el quirófano. La comunicación desde The Clinic, una residencia en el barrio londinense de Marylebone, se blindó para preservar la intimidad de la familia real.
El heredero de la Corona anuló su agenda para estar centrado en su mujer y la baja de la princesa se extendería hasta Semana Santa. La recuperación prosigue en el hospital por tiempo indefinido y debido a las complicaciones de ese postoperatorio explican que ese tiempo sea más prolongado de lo habitual.
Sobre la recuperación de Carlos III Buckingham ha informado de inmediato que todo se ha desarrollado de manera satisfactoria mientras que el palacio de los príncipes señaló días atrás que no van a añadirse más informaciones sobre el estado de salud de la princesa, preocupante aunque fuera de graves riesgos en estos momentos.
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