Un cambio radical
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Volcada en sus hijas
La revista ¡Hola! lleva a su portada de esta semana a Paloma Cuevas, para hablar de su inminente firma del divorcio con el diestro Enrique Ponce y una nueva etapa que ya comenzó a atisbar el pasado verano, cuando se conoció la relación del torero valenciano con una estudiante almeriense de Derecho, Ana Soria.
Entre las nuevas tareas que emprende Cuevas se encuentra el diseño y en la portada luce uno de los vestidos que ha elaborado junto a Rosa Clará. Sin querer incidir en un conflicto personal con Ponce, Paloma desea atemperar este momento de la rúbrica de separación.
"El único sentimiento que tendrá cabida en nuestras vidas será siempre el amor familiar" hacia las dos hijas del ya finalizado matrimonio, Paloma y Bianca. Al cabo de un año de negociaciones, por momentos incómodas, la ex pareja parece haber llegado a un acuerdo y coincidirán en la primera comunión de Blanca que está prevista para septiembre.
La diseñadora insiste ahora que su esfuerzo se focaliza en sus hijas y le corresponde afrontar una nueva evolución personal tras su prolongada relación con Ponce, de quien no muestra una opinión frontal sobre su decisión de iniciar el romance con la joven almeriense.
La revista Semana por su parte vincula a Paloma Cuevas con un millonario mexicano, Eugenio López Alonso.
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