Originalidad sin límites en dueñas

Todo acontecimiento está lleno de anécdotas y curiosidades, pero si se trata de la boda de la duquesa de Alba y ésta reúne a multitud de personas en un espacio reducido, el entretenimiento está más que asegurado. A lo largo de la mañana de ayer, Dueñas fue el centro de las miradas de toda España. Y si unos salían de sus casas con el objetivo de ganarse algún minuto de televisión por sus atuendos tan atrevidos como esperpénticos y pancartas de todo tipo, otros optaron por hacer del acontecimiento su particular agosto vendiendo todo tipo de merchandising improvisado. También hubo quien aprovechó el tirón mediático de la cita para reivindicar sus derechos a pleno pulmón y un grupo de chicas tenía más interés en ver de cerca al guapo Cayetano Rivera que a los propios protagonistas.

Tampoco faltaron los regalos para los novios. Diversos ramos de flores para los dos, una hermosa cesta de pan y hasta una mariscada tamaño industrial. Con tanto júbilo, hasta un falso Borbón, un actor uruguayo, no paró de hacerse fotografías y una simple peluca rizada de color blanco captaba la atención de todos los medios. Protagonistas inesperados que, guste o no, también marcaron la jornada festiva. Como la chica que, feliz, posaba con el ramo de novia de Cayetana, el mismo que rodó varias veces por el suelo antes de tener, por fin, nueva dueña.

No puede pasarse por alto que los recién casados optaran por un cariñoso beso en la mejilla y que en vez de besarse ante la gente que se agolpaba en la calle optara por bailar. Eso sí, las muestras de afecto fueron una constante entre los invitados. Las cámaras incluso fueron testigos de un generoso abrazo entre Cayetano Martínez de Irujo y Díez. Todo sea por la felicidad de la duquesa.

Vídeo: Ainhoa Ulla