Manuel Díaz "Mi madre y yo ya lo sabíamos, ahora también lo sabe él"
El diestro confiesa sentirse "feliz y tranquilo" tras el juicio, celebrado ayer en la Audiencia Provincial de Córdoba, en el que se ratificó la prueba de ADN que confirma que es hijo de Manuel Benítez 'El Cordobés'.
"Esto va para largo, así que hoy toca comer patatas con huevos. Y si se quiere venir 'El Cordobés', pero el hijo, a mi casa invitado está". Así de animada se mostraba ayer una vecina de Córdoba ante su grupo de amigas cuando no eran ni las nueve de la mañana a las puertas de la Audiencia Provincial de Córdoba. Y no eran las únicas madrugadoras que se habían desplazado hasta la zona. Ya entonces eran numerosos los periodistas allí agolpados, procedentes de todos los puntos de España. A las 11:30 horas estaba prevista la celebración de la vista -a puerta cerrada- que ratificaría la prueba de ADN que confirma la filiación de Manuel Benítez 'El Cordobés' y Manuel Díaz, y el ajetreo era más que notable. "Ése no da la cara" comentaba otra señora refiriéndose a Benítez, "y eso que vive ahí enfrente. No la ha dado en cuarenta años, ¿la va a dar ahora?". Y no, no iba muy desencaminada, pues Manuel Benítez efectivamente no se presentó a pesar de estar "obligado" a ello, tal y como confirmó minutos antes del comienzo del juicio Fernando Osuna, el abogado de Manuel Díaz. "La prueba de ADN confirma en un 99,99 por ciento que son padre e hijo, así que la vista será rápida y sencilla. Los médicos forenses detallarán el procedimiento científico de las pruebas a las que tanto Díaz como Benítez se han sometido, pero no habrá preguntas a testigos. Cuando los resultados de las pruebas son tan contundentes todo lo demás es irrelevante", explicó. Osuna no esquivó ninguna pregunta hasta que, pasadas las 11 de la mañana, bajó de un taxi su cliente. Manuel Díaz 'El Cordobés', entre aplausos y al grito de "viva los toreros buenos de Córdoba", se vio muy pronto envuelto en una nube de periodistas, minutos tensos en los que casi se masca la tragedia con tropiezo de su letrado incluido y los enfados pertinentes de los guardias civiles responsables de la seguridad a puertas del juzgado. Y todo ello bajo un sol de justicia; curioso símil.
Eran más de las doce del mediodía y una vez, en el interior, el perito había ratificado la prueba de ADN, sin que por parte de los representantes legales de Manuel Benítez hubiera oposición a su determinación, un visiblemente emocionado y agradecido Manuel Díaz salía por la misma puerta por la que había accedido a la audiencia, pero esta vez acompañado de unos agentes de la Policía Nacional para evitar males mayores. "No puedo decir que esté feliz, porque yo no hubiese querido que esto se solucionase aquí, pero sí estoy tranquilo. Ahora solo quiero irme a comer con mi madre, uno de sus potajitos", comentó el torero, que aseguró no sorprenderse de la ausencia a la cita de su padre. "Podría haber demostrado mucho viniendo a este juicio, por lo menos para quedar como un buen hombre. Pero no me sorprende, en lo que a él respecta, siempre he estado solo". A la espera de la sentencia -que se conocerá en unos cinco días y que de ser positiva le haría constar como hijo de Benítez en el Registro Civil, incluyendo el derecho de la legítima estricta-, Díaz asegura que no se plantea cambiar su apellido por ahora. "Lo que quiero es la tranquilidad para mi familia y encontrar sobre todo la verdad de mi madre. Yo intento buscar mi identidad, la identidad de mis hijos y dejar claro que todo el mundo tiene derecho a saber de dónde viene", explicó. A lo que añadió: "Yo lo sabía y lo he sabido siempre porque mi madre nunca me lo ha ocultado. Yo siempre he sabido quién soy, y ahora él también lo sabe".
Y con la voz entrecortada y los ojos brillantes se despidió de los allí presentes, sin no antes dar un beso de agradecimiento a su esposa, Virginia Troconis, uno de sus grandes apoyos en estos momentos tan delicados. "Simplemente soy un hombre que teniendo un padre de humo va a conseguir que sus hijos tengan un abuelo de verdad", concluyó el hijo del 'Quinto Califa'.
No hay comentarios