Laura Boyer se despidió lamentando cómo Isabel Preysler la separó de su padre

La economista Laura Boyer fallecía la semana pasado, el 23 de febrero, justo cuando se cumplían 40 años del anuncio de la expropiación de Rumasa por el primer gobierno de Felipe González, fecha en la que todos los españoles le pusieron cara al ministro de Hacienda en ese momento, Miguel Boyer. El llamado "superministro" estaba casado en 1983 con la ginecóloga Elena Arnedo y tenían dos hijos. La vida del posterior presidente del Banco Exterior de España dio un vuelco cuando conoció a Isabel Preysler, con la que se casó en 1988 tras conocerse su relación sentimental en 1985.

Laura Boyer, rendida admiradora de su padre, al que siguió sus pasos en el mundo financiero, ha muerto a los 57 años y era una adolescente cuando Miguel Boyer se divorció de su madre. Su relación fue correcta durante algunos años pero hubo etapas de desencuentro y distancia.

En un escrito enviados a medios como Semana, que lo lleva en su último número a portada y en forma de entrevista, Laura se despedía dejando algunas reflexiones y sentimientos. Una de las claves que ha trasladado ha sido el triste distanciamiento que tuvo con su padre y lo achaca a la presencia de Isabel Preysler, a la que acusa de esa mala relación. Arnedo se encargó tras el divorcio de todo lo relacionado con los dos hijos del matrimonio.

No tuvo un vínculo fácil Laura Boyer con Isabel Preysler y la hija estuvo junto a su padre en su convalecencia final, cuando falleció en 2014."Al principio Isabel Preysler era mi enemiga. Cuando murió mi padre, pasé a odiarla", expresa con amargura Laura Boyer. El fallecimiento de su progenitor la marcó, tal como se contempla en las fotografías del funeral. A los pocos meses de la muerte de Miguel Boyer su viuda rehacía su vida saliendo con Mario Vargas Llosa, con el rompió hace dos meses públicamente. La hija del 'superministro' siente que Isabel Preysler fue una mala influencia para ella a lo largo de todos estos años.