Doña Sofía cumple con la tradición de Jesús de Medinaceli

La madre de Felipe VI ha estado esta mañana en la basílica de Jesús de Medinaceli, en el centro de Madrid, cerca del Congreso de los Diputados. La reina doña Sofía ha rezado ante la venerada imagen, en un besapiés que congrega a miles de fieles que guardan cola durante días. Fue aclamada por los asistentes y ha sido la primera aparición de la esposa de don Juan Carlos tras conocerse que se archiva la investigación sobre los ingresos del rey emérito por la Fiscalía del Tribunal Supremo.

Jesús de Medinaceli estaba expuesto en besapiés con motivo del primer viernes de Cuaresma, un oficio que se suspendió el pasado año por la pandemia pero sí que tuvo lugar en 2020 antes que fuera decretado el estado de alarma y se confinara a toda la población.

Como marca la tradición de la Familia Real, doña Sofía ha asistido a esta importante cita religiosa de la Cuaresma en Madrid. La reina vestía una chaqueta negra de terciopelo y un conjunto morado, blusa de motivos líneas y pantalón en el color de la veneración cofrade.

Doña Sofía acudió pasadas a las 11.30 y fue recibida en la puerta del templo por el superior provincial de la comunidad de los padres capuchinos, Benjamín Echeverría, y otros representantes de esta orden que custodia la basílica. Por motivos de la pandemia, la reina ha rezado sin besar la querida imagen, posando la mano sobre el pie. En el transcurso de la visita intercambió comentarios con los devotos, con espontáneas voces de admiración hacia la madre del Rey. Una asistente quiso regalar un pañuelo a la reina, que lo aceptó, agradeciendo el cariño de los madrileños.