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Doña Sofía acompaña a los Reyes en Palma

La reina emérita, sin la asistencia por segundo año de don Juan Carlos, acude junto a sus nietas al oficio pascual en la catedral mallorquina La princesa y su hermana, radiantes

Doña Sofía posa orgullosa ayer junto a la nieta que lleva su nombre.
Santi Rojas

28 de marzo 2016 - 01:00

Don Juan Carlos volvió a estar ausente del posado más entrañable y señalado de la familia del Rey, el de la misa de Pascua en Palma de Mallorca. Felipe VI y su esposa, doña Letizia, acudieron con sus hijas a la seo palmesana en el mediodía de ayer y contaron con la compañía de la reina Sofía, que ha pasado los días vacacionales en las Baleares y hace una semana presidía el concierto solidario de Proyecto Hombre precisamente en el primer templo mallorquín. La buena relación entre la reina emérita y su nuera quedaba patente en este primaveral domingo. El proceso del caso Nóos, con la declaración de la infanta Cristina, afecta la madre del Rey, que ayer recibía las muestras de cariño de los presentes. Don Felipe fue aplaudido como muestra del reconocimiento a su imagen y esfuerzo en estos casi dos años de reinado.

Tampoco se encontraba en Palma la infanta doña Elena, que en el pasado Jueves Santo se hallaba en Madrid participando en la penitencia del Cristo de los Alabarderos. Don Juan Carlos y su hija estuvieron en la misa de Pascua de 2014. Doña Cristina y su marido, Iñaki Urdangarín, no acuden a la ceremonia desde el año 2005.

Centenares de personas reunidas en torno a la catedral de Palma, con cientos de móviles en alto captando las instantáneas, recibieron con aplausos a los Reyes de España, a doña Sofía y a la princesa Leonor y la infanta Sofía, a la llegada a las puertas de la seo con motivo de la festiva misa del Domingo de Resurrección.

La familia del Rey accedía al templo en un coche conducido por el propio don Felipe, que al bajarse saludó a algunos de los asistentes y fue recibido por el obispo de Mallorca, Javier Salinas, antes de entrar a la misa. En esta edición no había representación política en las recepción de los Reyes al llegar a la catedral, por lo que la presencia se ha visto reducido a un posado tradicional donde las hijas de don Felipe tienen unos minutos de protagonismo para los fotógrafos. Sus sonrisas infantiles fueron un año más el centro de los objetivos de los numerosos medios destacados.

En el posado se colocaron de izquierda a derecha, los Reyes y doña Sofía, mientras que en el centro, en primer plano, estaban la princesa de Asturias y su hermana, la infanta Sofía.

Don Felipe llevaba un traje azul clásico, doña Letizia ha elegido para la ocasión una camisa de rayas negras y blancas horizontes bajo una llamativa y primaveral chaqueta fucsia de la firma Carolina Herrera, acompañada por una cartera del mismo color de Adolfo Domínguez (que ya lució en la inauguración de Arco), pantalones negros y zapatos azul marino de tacón grueso. La princesa Leonor (10 años) y la infanta Sofía (que ha cumplido 8), casi idénticas, llevaban pantalón, bailarinas y chaqueta fina rosada de Pili Carrea. La princesa llevaba una divertida camiseta de Nanos y su hermana, una blusa blanca con encaje de flores.

Finalmente, doña Sofía, que involuntariamente venció a su nuera en los piropos del público, llevaba un vistoso abrigo con un estampado floral, verde y azul, que ha complementado con tacones y un bolso pequeño de tono metálico.

Al salir de la misa, que duró algo más de tres cuartos de hora, los asistentas todavía esperaban a los Reyes, que los saludaron una vez más. El prior de la Sang, Lluc Riera, que ofició la ceremonia religiosa, estrechó las manos de los Reyes al término de la función, mientras se escuchaban vivas a los monarcas. La Reina y sus hijas se despidieron de los palmesanos desde las ventanillas del vehículo que los conducía de nuevo a Marivent. La Policía Nacional y la Policía Local habían efectuado un amplio dispositivo de seguridad, controlándose todo el recinto de la parte vieja de la capital balear.

Los monarcas regresan hoy a Madrid tras pasar estos días de descanso de Semana Santa en Mallorca, donde estuvieron tras mostrar sus condolencias en la embajada belga este miércoles por los atentados de Bruselas.

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