Demi Lovato, adiós al pasado
La ex chica Disney, a sus 19 años, habla por primera vez de su superada adicción a la cocaína y otras drogas, lo que acabó con su ingreso en 2010 en un centro de rehabilitación. Según explica, se sentía triste al no saber asimilar el éxito y la popularidad.
Demi Lovato ha dejado atrás el pasado y no quiere volver a repetir los mismos errores. A pesar de que el éxito ha vuelto a su vida (o precisamente por ello) y tras publicar su nuevo disco, la exestrella Disney ha querido hablar claro de las circunstancias que la llevaron a una clínica de desintoxicación y a vivir el infierno de las drogas, en este caso y al parecer, la cocaína. Lo ha hecho en una entrevista concedida a la revista Fabolous Magazin
Tras su paso por rehabilitación, Demi ha hablado por primera vez en esta entrevista sobre su pasado con las drogas. "Es algo sobre lo que no suelo querer hablar", comenta. Sin embargo, una vez superada esta fatídica etapa, ha contado algunos detalles sobre las circunstancias que la condujeron a un problema que por poco le cuesta la vida.
La cantante llega a confesar, incluso, algunos de los motivos que la llevaron a esta espiral de autodestrucción. Y es que, al parecer, la joven no supo asimilar su éxito y su fulgurante fama, quizás debido a su juventud. "Lo que puedo decir es que estaba deprimida. Salía al escenario delante de 18.000 personas y de repente estaba sola en la habitación de mi hotel. Me venía abajo, y al final lo que quería era recrear esa sensación, seguir arriba", afirma.
Aprovechando su experiencia, la artista ha querido denunciar públicamente también la facilidad con la que podía conseguir sustancias estupefacientes. "Los promotores me daban drogas y alcohol en los restaurantes y pubs", explica.
Demi también deja claro que esta práctica es habitual, ya que lo que querían era que ella volviese a esos sitios y por eso la invitaban a todo. "Básicamente, me besaban el culo", cuenta.
Después de meses de desenfreno y abusos, acabó entrando en un centro de rehabilitación en 2010. "Nadie dice no. Eso es por lo que muchos acaban sufriendo sobredosis y muriendo. Eso podría haberme pasado a mí", sostiene.
Ahora, habiendo dejado atrás sus adicciones, la cantante quiere servir de ejemplo para evitar que otros jóvenes acaben como ella y advierte: "Ser una celebrity puede ser peligroso".
Lo cierto es que Demi, a sus 19 años, parece ser ahora muy consciente del peligro que ha corrido su vida y hacia donde quiere encaminar sus pasos, no solo profesionalmente. Dejando atrás sus escarceos con las drogas y el alcohol, desde que salió del centro de rehabilitación muestra una seguridad impropia de su juventud.
Estos días, la exchica Disney está presentando una gira por Latinoamérica que ya la ha llevado a Perú y Venezuela. En Brasil tiene previsto ofrecer conciertos próximamente en Río de Janeiro, Belo Horizonte y San Pablo. Allí se ha la visto este último fin de semana disfrutando de sus espléndidas playas. Con más curvas que nunca, Demi disfruta a tope de esta segunda oportunidad que le ha dado la vida.
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