Amaia y Alfred, la última pareja de ‘OT’ que rompe
Ruptura de 'Almaia'
Los cantantes ponen punto y final a su relación de un año siguiendo la ‘maldición’ que persigue a las parejas de 'Operación Triunfo'.
Amaia y Alfred, la pareja más famosa de OT –con permiso de Chenoa y Bisbal– han tomado –como ellos– caminos separados. Su romance comenzó dentro de la academia de Operación Triunfo 2017 y, a pesar de su repercusión, apenas ha durado un año. Conquistaron a los seguidores del programa, que incluso les apodaron Almaia. Ahora, los cantantes están solteros y acaban de comenzar una nueva etapa en sus vidas.
El amor se acaba. Y eso es lo que ha pasado entre Amaia Romero y Alfred García. Los artistas han puesto punto y final a su relación después de enamorar a los fans del talent musical, y a medio mundo con su actuación en el Festival de Eurovisión. De OT han salido grandes cantantes, pero también muchas parejas sobre las que parece planear una especie de ‘maldición’: la mayoría de ellas rompieron al poco tiempo de dejar el concurso (Bisbal y Chenoa, Lorena Gómez y Leo Segarra, Aitana y Cepeda, entre otras). A las que ahora se suman Almaia, como les llamaban sus fans, a quienes esta noticia les romperá el corazón.
Amaia recogía sus pertenencias de casa de Alfred. En las imágenes publicadas por la revista ¡Qué me dices! se ve cómo la cantante lleva una caja de cartón, en la que se puede leer ‘Esta caja es la de Amaia’, que contenía las cosas que aún quedaban en casa de su ex. Estas fotos eran publicadas días después de que Amaia y Alfred coincidieran en Barcelona en la gala contra el sida People in Red, organizada por la Fundación Lucha contra el Sida. Allí, lo único que dijo Amaia era que la relación con Alfred era “muy especial”, pero ni confirmó ni desmintió la ruptura.
A estas imágenes se unen las que publicó ayer Lecturas. Tras su casual encuentro en Barcelona, quedaron supuestamente lejos de los flashes para hablar, y las lágrimas de Alfred y el rostro apesadumbrado de Amaia lo dicen todo. El revuelo en las redes sociales no se ha hecho esperar; tampoco el debate sobre la supuesta violación de su intimidad.
No hay comentarios