Trabajadoras (gallegas) saliendo de la fábrica

Dialoga Nación con El año del descubrimiento en su reivindicación de las trabajadoras gallegas de las fábricas de cerámica Pontesa a las que se entregaron en cuerpo y alma incluso en las peores condiciones. Un diálogo que recupera también el archivo de la lucha y los palos en los 90 y que se remonta incluso más atrás en el tiempo, hacia esas imágenes oficiales del trabajo sistematizado en los años del franquismo.

Sin embargo, a Margarita Ledo, veterana documentalista, historiadora y docente, le interesa trascender esa realidad laboral truncada y el formato más ortodoxo para dar voz y cuerpo memorístico a todas las trabajadoras gallegas de cualquier sector en las que se asienta una larga historia de explotación, supervivencia, tesón e incluso abusos, relatados aquí por una de las actrices que, en modalidad híbrida, acompañan a las auténticas operarias y escenifican en el presente los relatos, las canciones o el grito de la resistencia.

Es tal vez en ese tramo performativo donde Nación, que no es otra que la patria simbólica de las mujeres obreras que no se han callado y sometido nunca, nos saca momentáneamente de su fértil diálogo entre el presente y el pasado, entre la reivindicación pendiente de sentencia y las huellas del tiempo.