Viernes de preferia: La cuenta atrás más esperada

Los 275.000 metros cuadrados que componen el Real de la Feria son un auténtico hervidero a escasas horas de que Sevilla se reencuentre con su fiesta más popular. Hay prisas, carreras y nervios. No es para menos. Es viernes de preferia y en Los Remedios se ultiman los preparativos para que la que ya se ha catalogado como la Feria más esperada dé su pistoletazo de salida con la tradicional noche del pescaíto este sábado. Y es que dos años de pausa dan para mucha entrega, muchas ganas y mucha ilusión.

Ese es el ambiente que ya se respiraba este viernes en el recinto ferial donde se han podido ver los primeros mantoncillos, en un grupo de mujeres extranjeras que se fotografían a los pies de la Portada, que recupera el diseño previsto para el2020, inspirado en el Hotel Alfonso XIII, y las primeras reuniones en el interior de las casetas, en algunos casos para intentar llegar a marchas forzadas al tradicional día del Alumbrado con todo listo y, en otras, con los primeros almuerzos sobre el albero tras dos años de sequía.

Así se vive un clásico en la Feria de Sevilla en el 137 de la calle Gitanillo de Triana, donde, un año más desde 1995, Miguel Gallego y su familia ofrecen a sus amigos el tradicional potaje de preferia que, con los cambios en el orden de días de la fiesta, pasó del domingo al viernes, pero siempre, en la jornada previa al tradicional pescaíto.

Es una forma de vivir la preferia como también lo es como lo hacen a escasos metros, en el 143 de la misma calle. Un grupo de señoras hacen flores a toda prisa mientras otros tantos descargan toda la ornamentación de la caseta, aún con mucho trabajo por delante. "Nos ha cogido el toro", comentan sin levantar la vista de sus labores. "Pero llegar, llegamos porque esta Feria es única", manifiesta una de ellas.

Y es que la Feria de Abril 2022 es una edición "especial" por ser "muy esperada" tal y como ha asegurado el delegado de Gobernación, Fiestas Mayores y Área Metropolitana, Juan Carlos Cabrera, en su primera rueda de prensa en el Real dos años después, no sólo por suponer la recuperación de uno de los eventos de la ciudad con mayor repercusión internacional sino porque, en este año, se cumplen 175 años de su fundación. "Es toda una alegría poder volver a vernos aquí", ha dicho el concejal a la prensa, antes de enumerar las novedades que trae este año la fiesta marcada por la pandemia sanitaria del Covid, con casetas que han instalado una montera en las trastiendas para favorecer la circulación del aire; y en la que el Ayuntamiento vuelve a apostar por una mayor inclusión de todos los colectivos, mediante la eliminación de 50 puntos negros para la accesibilidad y la ampliación de los días (tres en total) en los que la Calle del Infierno reducirá el ruido para favorecer que acudan personas con trastornos del espectro autista, así como por la reducción de la contaminación mediante el uso de más de 200.000 bombillas tipo led. "Está todo controlado. Todos estábamos deseando que llegara este momento", ha insistido Cabrera, que ha agradecido el trabajo de los servicios públicos para que "todo esté perfecto" para "disfrutar" de un "acontecimiento único". "Deseo que cuando termine la Feria podamos decir que ha sido extraordinaria", ha concluido el edil.

Y si la de 2022 es una Feria de novedades, también lo es de recuperación de tradiciones perdidas en los dos últimos años como son las recepciones en las casetas. Entre furgonetas de reparto y grúas, llegaban los primeros feriantes al real. La cita este viernes de preferia era en el número 18-20 de la calle Costillares, donde el sindicato CSIF celebraba su recepción, un clásico ya de cada viernes previo a la noche del pescaíto. Por ella han pasado, como no podía ser menos, los principales caras del sindicato con Rosendo Martínez como presidente de CSIF Sevilla como cabeza visible, al que han acompañado el presidente nacional, Miguel Borra, y autonómico, Germán Girela. No se han perdido la cita autoridades del mundo político como el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, y los consejeros de Empleo y Educación y Deporte, Rocío Blanco y Manuel Alejandro Cardenete, respectivamente, entre otros.