La aldaba
Carlos Navarro Antolín
El rey brilla al defender lo obvio
Barómetro octubre 2019 | Escenario nacional
Franco sigue dividiendo a los españoles entre izquierdas y derechas. Un 51% de los encuestados por Ipsos están de acuerdo en que los restos de Franco se trasladen desde su sepultura actual, en el Valle de los Caídos, al cementerio familiar de El Pardo. Un 42% está en contra. Muy igualados, pero con una clara diferencia a favor del traslado que el Gobierno ejecutará esta semana. Sin embargo, las diferencias de posturas dependen del partido al que se vota de modo habitual.
Franco tampoco deja muchos indiferentes. Solamente un 9% opina que le da igual, lo que es un porcentaje muy bajo cuando se responde a pregunta sobre asuntos políticos.
Sólo el 6% de quienes dicen votar a Vox están a favor de que se exhumen los restos del anterior de quien fuese jefe del Estado hasta su muerte en 1975. Lo mismo ocurre con el PP, un 7% se opone a que la tumba del dictador cambie de lugar. Entre los votantes de Ciudadanos también es muy bajo el apoyo a la decisión del Gobierno, el 17%.
El traslado de los restos de Franco es una decisión del Gobierno de Pedro Sánchez, que venía respaldada por peticiones del Congreso y del Parlamento Europeo. El Tribunal Supremo también le ha dado la razón. La oposición al traslado tampoco significa un apoyo de estos sondeados a la dictadura. Hay una corriente masiva que también opina que esto es un gesto electoralista del Gobierno.
Llama la atención que sólo la mitad de los votantes socialistas está "totalmente de acuerdo" con esta operación. No hay dudas entre los votantes de Unidas Podemos, casi ocho de cada 10 de ellos no tiene ninguna duda de la exhumación.
El Gobierno tiene previsto sacar a Franco del Valle de los Caídos esta semana. En este mismo periódico, Pedro Sánchez respondió que el traslado no le dará ningún voto más al PSOE, pero que debía hacerlo por un asunto de dignidad: ningún dictador está enterrado en Europa en un mausoleo de Estado.
El temor a una crisis económica va en aumento. El 52% de los sondeados opinan que la desaceleración económica terminará por afectarle a los bolsillos. Sólo un 17% no tiene temor a este enfriamiento económico. Hay empate entre quienes opinan que PSOE y PP están mejor preparados para hacer frente a la crisis. Un 21% por cada partido, aunque en todos desconfía el 25%.
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