Duro castigo morado a la izquierda 'abertzale'

La irrupción de Podemos en el escenario nacional tuvo su fiel reflejo en el País Vasco, donde fue el partido político con más votos por delante incluso que el PNV, aunque quedó relegado a la segunda posición en cuanto a asientos con nada menos que cinco, uno menos que la histórica formación nacionalista. El resultado de la fuerza liderada por Pablo Iglesias fue un rotundo éxito, directamente proporcional al batacazo de la izquierda abertzale, ya que Amaiur obtuvo media docena de los 18 asientos que se reparten las tres provincias vascas en 2011 y cuatro años después EH Bildu perdió cuatro, aunque rebasó en cerca de 20.000 papeletas al PSOE, y quedó relegado a la penúltima posición, empatado a dos con el Partido Popular.

También sigue su particular caída libre el Partido Socialista, ya que hace sólo siete años se alzó con la mitad de los escaños (9), mientras que ahora sólo agarró tres diputados para el Congreso. Ciudadanos, como estaba previsto después de su posicionamiento respecto al Concierto Vasco, estuvo por debajo de las 50.000 papeletas y sin escaños.

Por tanto, el festejo llegó en la sede de Podemos, con el Partido Nacionalista Vasco celebrando igualmente que gana un asiento en el Parlamento. La formación morada no existía en los anteriores comicios y demuestra el hartazgo de la sociedad con los partidos tradicionales, circunstancia que se refleja a la perfección en los resultados que ha logrado en el País Vasco y también en Cataluña.

También pierden fuerza los partidos nacionalistas respecto a los comicios de hace cuatro años, ya que entre Amaiur y el PNV sumaban 11 escaños, por ocho de ahora; Podemos, PSOE y PP alcanzan 10 entre los tres. La tendencia hacia abajo de los partidos nacionales continúa en el País Vasco, excepto en el caso de Podemos, con un magnífico logro de cinco diputados y más del 25% de los votos.

El portavoz de EH Bildu, Hasier Arraiz, reconoció que para la coalición abertzale es una noche "triste" en la que "se ha caído" porque, a su entender, "ha sido la lógica estatal la que se ha impuesto en estas elecciones; hoy nos hemos caído y no hemos sido capaces de interpretar que había mucha gente en el País Vasco que veía posibilidades de cambio en el Estado".