"Ciudadanos es un proyecto peligroso para la mayoría social"

Alberto Garzón. Candidato a la Presidencia del Gobierno de Izquierda Unida-Unidad Popular.

El político malagueño confía en las posibilidades de su partido, al que reivindica como el único rupturista con el sistema del 78 Aboga por un proceso constituyente asambleario

Alberto Garzón, en Sevilla después de un acto electoral el pasado sábado.
Alberto Garzón, en Sevilla después de un acto electoral el pasado sábado.
Carlos Rocha Sevilla

15 de diciembre 2015 - 06:00

Lo más normal en diciembre es pillar un resfriado, pero si se lleva encima el peso de una campaña electoral, es todavía más probable. Tiene la voz tomada, pero Alberto Garzón se ve con fuerzas para dar la sorpresa después del 20-D.

-¿Cómo lleva la campaña?

-De lujo. Sentimos un apoyo de la gente que hace tiempo que no veíamos y se palpa algo en el ambiente, sobre todo en las redes.

-Están cosechando un gran éxito entre los jóvenes, los que manejan internet.

-Tenemos a miles de voluntarios trabajando. En las asambleas de Unidad Popular encuentras gente muy diferente, pero sobre todo jóvenes. Y cuando se han puesto en la sala de máquinas de las redes se ha convertido en una campaña irreverente y con las cosas claras.

-Pero no encuentran espacio en medios más tradicionales.

-Más que invisibilización hacia nosotros hay es una hipervisibilización de los demás. El debate a cuatro fue una exclusión antidemocrática de la izquierda de este país porque somos incómodos para el poder y eso genera costes.

-Se están reivindicando como la izquierda real.

-Estamos dejando claras nuestras propuestas. Somos la única fuerza rupturista con el sistema político del 78. Las otras cuatro han sido ya bendecidas por el presidente de la CEOE. Somos los únicos que hablamos de nacionalizar empresas, de decir no a la OTAN y de un proceso constituyente.

-¿Cómo llevan la irrupción de Podemos?

-Creemos que nació como una fuerza rupturista en mayo de 2014, pero después de hacer imposible la candidatura de unidad popular con nosotros, giraron al centro y abandonaron muchos de sus principios. No descarto que la gente de Podemos nos vote. Es más, incluso me gustaría.

-¿Seguiría dispuesto a formar parte de un proyecto común con Podemos?

-Siempre hemos sido distintos, pero utilizamos una palabra muy bella en la izquierda que es el reconocimiento. Te reconozco como diferente pero podemos trabajar juntos. Hay lugares donde después de las municipales se cogobierna, como Madrid. La alcaldesa es independiente, la portavoz, de Podemos; Ecología es de Equo y Hacienda y Economía de IU. Era posible pero en Podemos ha ganado un alma que lo quería llevar al centro y ese alma no quiere a la izquierda.

-Pero en Cataluña y Galicia sí.

-En torno a un programa con candidaturas rupturistas. Es una contradicción de Podemos.

-Y esas listas se visualizan como únicamente de Podemos.

-Es una estrategia injusta de Podemos. Son candidaturas independientes porque son el resultado de confluencias autónomas. Le estamos explicando a la gente que nosotros estamos ahí.

-¿Qué prefieren en IU, el bipartidismo o el nuevo modelo con cuatro grandes fuerzas?

-Cuanta más pluralidad haya, mejor. Pero nosotros tenemos que construir un espacio diferente al resto. La gente tiene que entender que es necesario un grupo de izquierda fuerte en el Congreso. Creo que vamos a dar la sorpresa y a ser determinantes el día después para configurar políticas en favor de la mayoría social.

-Parece que ganará la derecha.

-Hay que explicarle a la población que Ciudadanos es un proyecto peligroso y hay mucha gente que va a votarlos porque son nuevos, aunque no sabe lo que opinan en sanidad y educación. Es importante desmontar esas mentiras porque sería terrible que a cuatro años del PP le sucedan cuatro años del PP con Ciudadanos.

-¿Podrá la izquierda convencer a esa mayoría social?

-Esa mayoría ya existe, lo que no hay es una traslacion institucional. La mayoría de la gente quiere sanidad y educación públicas y una serie de reivindicaciones propias de la izquierda. Pero hay una ley electoral injusta y partidos que dicen una cosa y hacen otra. Tenemos que hacer el esfuerzo para que la mayoría sociológica se refleje en las instituciones.

-¿Para ello hay que cambiar la Constitución?

-Proponemos un nuevo país y eso requiere una nueva constitución. No queremos una reforma porque no permite tocar los elementos fundamentales. Para blindar la sanidad y la educación necesitamos un proceso constituyente y que baje el debate a la calle. Los demás proponen sólo chapa y pintura.

-¿Cómo se implica a la población en ese proceso?

-Nuestra idea es hacer asambleas al más puro estilo 15-M para que la gente pueda hacer propuestas que les lleguen a los diputados constituyentes y que esas propuestas sean incluidas. Se ha hecho en Ecuador y en Islandia y ahora tienen un país más participativo.

-¿Cuál sería el modelo territorial?

-En IU no somos independentistas. Creemos que los retos de las clases populares de Cataluña y Andalucía son los mismos. Proponemos una república federal como solución al callejón sin salida donde nos han metido la oligarquía catalana, representada por Mas, y la del resto de España, representada por Rajoy.

-¿España no es ya un país casi federal?

-No, porque tenemos competencias descentralizadas, pero no tenemos una hacienda descentralizada. Hay que resolverlo desde el respeto a las identidades nacionales y con la garantía de que haya elementos de solidaridad.

-¿Qué hay del encaje de España en la Unión Europea? ¿Puede resistirse un Gobierno a las exigencias de Bruselas?

-Es perfectamente posible. Francia va a incumplir su déficit para financiar armamento. España no es como Grecia y sí tiene capacidad de negociación. Puede incumplir el déficit y debe hacerlo para financiar primero a las personas y luego devolver la deuda.

stats