Santamaría dice que nadie discutió la "corresponsabilidad fiscal" sino que se pidió analizar cómo se desarrolla

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha tratado este miércoles de rebajar el debate sobre la necesidad de armonización fiscal entre comunidades autónomas, afirmando que en la Conferencia de Presidentes nadie discutió la "corresponsabilidad fiscal" sino que se pidió "analizar cómo se está desarrollando".

Además, ha subrayado que no se trata de un debate lineal entre comunidades gobernadas por el PP y las gobernadas por el PSOE, apuntando que Madrid -donde gobierna el PP- y Baleares -con un Ejecutivo del PSOE-- plantearon un punto de vista similar en este asunto.

"Yo no vi ayer que se discutiera este elemento de autogobierno, sino que se pedía analizar cómo se está desarrollando", ha explicado en una entrevista en la Cadena Ser, recogida por Europa Press. Además, ha relatado que en el debate hubo quien apeló al "respeto del autogobierno".

En este contexto, ha explicado que lo que acordaron fue "lo más sensato" que es "estudiar cómo se ejerce esta responsabilidad fiscal": "Si estamos analizando el modelo de financiación autonómico, que tiene un componente de ingresos y otro de gastos, lo lógico es conocer cómo se ha venido desarrollando esa realidad".

Así, ha remarcado que el debate no es simple, porque también hay que ver cómo se gestionan los servicios públicos y su coste efectivo y conocer la realidad de cada comunidad autónoma, puesto que éstas tienen diferentes estructuras sociales y económicas.

En todo caso, se ha mostrado convencida de que si la economía crece y mejora la recaudación, "este asunto, aun siendo importante, se pondrá en sus justos términos".

Santamaría ha relatado que el debate de la Conferencia de Presidentes fue sincero, porque "a las comunidades, como a los españoles, hay que decirles la verdad" y la realidad es que con la crisis se perdieron 70.000 millones de recaudación que aún no se han recuperado.

Este año, ha dicho, se recuperará el nivel de PIB de 2007 y, además, esta el reto de las pensiones, que es "40.000 millones más caro". "La única manera de llegar a un acuerdo es contar a la gente la realidad de lo que hay", ha remachado.