El Rey tendrá que someterse a una segunda operación

El Rey se recupera en el Hospital Quirón Madrid de la intervención quirúrgica para sustituirle la prótesis en la cadera izquierda, que ha concluido con éxito, según han informado fuentes de la Casa del Rey. Don Juan Carlos ha abandonado el quirófano unas tres horas después de entrar en la sala de operaciones, donde ha sido intervenido por el cirujano Miguel Cabanela, en una operación en la que ha trabajado junto a él su colaborador habitual en la Clínica Mayo de Minnesota, el estadounidense Robert Trousdale. La Reina Doña Sofía, la Infanta Elena y la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, han llegado a última hora de la tarde al centro hospitalario. La vicepresidenta ha abandonado la clínica una hora más tarde. Poco después han llegado los Príncipes de Asturias. Don Felipe y Doña Letizia se han marchado, junto a la Reina y la Infanta, pasadas las 00:15, minutos antes de que los médicos que han operado al Rey comparecieran en rueda de prensa. "Ha ido como la seda", ha dicho el Príncipe a la salida del hospital.

El doctor Cabanela, que ha llevado a cabo la intervención junto a su compañero Trousdale y ha dicho que "afortunadamente todo ha sido bueno para nosotros, para el Rey y para el país", ha explicado que Don Juan Carlos tenía dos gérmenes en el tejido periprotésico, que rodeaba a la prótesis de la cadera (estafilococos hominis y propioni bactirium), "no enormemente virulentos".

En esta operación le ha sido implantada una prótesis provisional, que "estará muy estable" y será sustituida por una definitiva dentro de unas ocho semanas. El Rey, que podrá levantarse al día siguiente de esta operación, tendrá que hacer rehabilitación y tomar antibióticos durante seis semanas. Durante ese periodo deberá reducir considerablemente su actividad, según ha indicado Cabanela, que ha desatado las risas de los periodistas al confesar que "no sé qué hace exactamente un rey". Aunque ha advertido que hablar de plazos siempre depende de la evolución del paciente, Cabanela ha afirmado que el Rey debería poder andar de nuevo sin muletas en tres meses y medio.

El Rey ha saludado a los periodistas, mientras les decía "bien, ahí voy", a su llegada en automóvil al Hospital Quirón Madrid. Desde el asiento del copiloto, con la ventanilla del vehículo bajada, Don Juan Carlos ha saludado con la mano a los numerosos periodistas presentes a la entrada del centro sanitario, en torno a las 15:15. El automóvil blindado que ha desplazado al Monarca desde el Palacio de la Zarzuela ha entrado a continuación en el garaje del hospital.

"Normalmente no venís tantos, mucho debe gustaros"

Horas antes, el Rey había ironizado con la prensa en un acto de entrega de credenciales de embajadores en el Palacio de la Zarzuela. "Normalmente no venís tantos, mucho debe gustaros", ha dicho a los periodistas presentes en el acto. Don Juan ha mantenido su agenda de la mañana y ha recibido las credenciales de 16 embajadores. Sin embargo, este acto ha modificado su formato habitual y, en vez de celebrarse en el Palacio Real, ha tenido lugar en el Palacio de la Zarzuela y ha sido más corto de lo habitual. El monarca ha esperado de pie y con buena cara en la sala de audiencias la llegada de los embajadores. Poco antes de su entrada, ha tenido oportunidad de bromear con los periodistas e ironizar con la expectación generada ante su inminente operación, la séptima en poco más de dos años.

Los embajadores han sido presentados uno a uno y han entregado sus credenciales ante Don Juan Carlos. Pese a la rapidez del acto, poco más de cinco minutos, el Rey ha intercambiado unas breves palabras con alguno de ellos, como con el de Nueva Zelanda, Michael Swain. Después ha tomado asiento ayudado por un asistente y ha compartido unas también breves palabras con todos ellos. En concreto, Don Juan Carlos ha recibido las credenciales de los embajadores de Líbano, Macedonia, Nueva Zelanda, Portugal, Gambia, Guinea, Guinea Ecuatorial, Iraq, Suiza, Polonia, Luxemburgo, Vietnam, Finlandia, Qatar, Estados Unidos y Malta.