El Rey pasa a planta en el hospital con una evolución "altamente satisfactoria"

El Rey se recupera bien y rápido de la operación de cadera izquierda a la que se sometió el martes por la noche en Madrid. "Está muy animado, con ganas de ponerse en pie en cuanto los médicos le dejen", dijo el Príncipe Felipe tras visitarlo. Don Juan Carlos pasó en la unidad de cuidados intensivos su primera noche en el hospital y por la mañana fue trasladado ya a una de las habitaciones suites del centro privado de la localidad madrileña de Pozuelo en el que fue intervenido.

Pasó "bien la noche", informó el centro en el primer parte médico. Su evolución es "altamente satisfactoria" y está "estable hemodinámicamente", "cómodo y con muy buen estado de ánimo". No se descartaba que pudiera levantarse e incluso caminar un poco, ayudándose de un andador o de unas muletas. "Está claro que está muy bien", dijo el Príncipe Felipe, "muy animado, preguntando sobre todo, interesado por todo".

Diez meses después de que le implantaran una prótesis en su cadera izquierda, el monarca comenzó a principios de este mes a sentir molestias en la articulación y en la pierna. Y los médicos confirmaron que sufría una infección. En la operación del martes por la noche, la quinta intervención a la que se somete en año y medio, la prótesis le fue sustituida por otra temporal. Y en unos dos meses, después de seis semanas con antibiótico intravenoso y otras dos sin él, tendrá que volver a pasar por el quirófano para que le coloquen una prótesis definitiva.

En este nuevo paso por el hospital, el soberano está siendo arropado por toda la familia real. El mismo martes por la noche, mientras era operado, estuvieron allí la Reina Sofía, los Príncipes Felipe y Letizia y la Infanta Elena. Este miércoles volvieron todos, la Reina ya al mediodía. La infanta Elena llevó con ella a Froilán, el mayor de sus dos hijos. La Infanta Cristina, la única que no acudió el martes, se desplazó este miércoles a ver a su padre a Madrid desde Ginebra, donde reside desde agosto junto a sus hijos.

A consecuencia de la convalecencia, el Rey no podrá participar el 12 de octubre en la celebración de la fiesta nacional de España y por primera vez faltará a una Cumbre Iberoamericana, la que tendrá lugar el 18 y 19 de octubre en Panamá. Cuando salga del hospital tras esta primera intervención, podrá estar "relativamente activo" desde unos días después, asumiendo posiblemente una agenda "un poco limitada" entre las dos operaciones, según dijo en la madrugada del miércoles el cirujano Miguel Cabanela, que llegó a Madrid de la clínica Mayo de Estados Unidos y dirigió la intervención. Hasta unas seis semanas después de la segunda intervención, el monarca no podrá caminar normalmente.

Esta nueva operación del Rey ha reabierto el debate sobre la conveniencia de que el monarca abdique en el Príncipe Felipe. Él, sin embargo, rechaza la idea de plano. "No se ha planteado en ningún momento la abdicación", dijo la semana pasada el jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno. En la arena política también se ha abierto el debate sobre la regulación de la figura del príncipe de Asturias. Felipe asume cada vez más actos de la Corona, pero carece de función y poder delegado porque el papel del heredero nunca ha sido regulado legalmente. Y esto conllevará, por ejemplo, que no pueda sustituir al Rey en la Cumbre Iberoamericana de Panamá.

Aunque PP y PSOE han dado señales de cuanto menos estar abiertos a regular la figura del príncipe de Asturias, el jefe del Gobierno español cerró la puerta a ello. El monarca volverá a sus labores "con la misma intensidad de siempre", dijo Rajoy en Nueva York, donde viajó para participar en la Asamblea General de la ONU. El Ejecutivo no se plantea ahora "en absoluto" regular la figura del heredero porque "no hay ninguna razón", aseguró. Fuentes de la Casa del Rey, entretanto, evitaron pronunciarse sobre la conveniencia o no de hacerlo. La cuestión, en todo caso, "corresponde al Parlamento", dijeron.