Rajoy avisa de que el PP le pondrá difícil a Sánchez gobernar con "los radicales"

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, pasó ayer por Córdoba lanzando una advertencia al candidato del socialista a la Presidencia del Ejecutivo, Pedro Sánchez. Que sepa que el PP no le va a poner nada fácil un posible gobierno con "los radicales".

Durante su intervención en la reunión extraordinaria que celebró la Junta Directiva Provincial del PP, el líder nacional de esta formación insistió en que "el Partido Popular tiene mayoría absoluta en el Senado y es la primera fuerza en el Congreso, por lo que la usará en caso de no gobernar para garantizar que aquí no se van a hacer disparates". Porque, insistió el presidente del Ejecutivo en funciones, "aquí no se van a hacer disparates, se va a defender la unidad de España, la soberanía nacional, la igualdad de los españoles, la recuperación económica y la creación de empleo".

Rajoy acudió a la ciudad califal después de haber declinado sólo unas horas antes el ofrecimiento del rey Felipe para presentarse como el primero de los aspirantes a la Presidencia del Gobierno. Con esa negativa a la deferencia del Monarca, el presidente en funciones somete a toda la presión posible a a Sánchez para que sea el dirigente socialista quien empreda los pasos pertinentes para intentar acceder a la Moncloa. "Sería un fraude y una falta de respeto a los más de siete millones de votantes del Partido Popular ir a perder el debate de investidura", apostilló Rajoy en Córdoba de la misma manera que lo había hecho en la rueda de prensa que ofreció el día anterior en el Palacio de la Moncloa tras mantener la audiencia con el Rey.

"¿Cómo va el candidato del PP a presentarse a un debate de investidura a la misma hora que los candidatos que le van a decir no ya están pactando y repartiéndose el próximo Gobierno?, se preguntó. "Y si de lo que se trata no es de que el candidato del PP sea investido, sino de que pierda la votación para que empiecen a correr los plazos que establece la Constitución, tengo que decir que los siete millones de españoles que han votado al PP no han votado para ser utilizados para abrir un plazo", añadió el candidato popular volviendo a poner de manifiesto su estrategia.

Rajoy convirtió el encuentro cordobés de ayer en mucho más que en una reunión de la Junta Directiva Provincial, se sirvió los numerosos focos mediáticos que apuntaban y se cernían sobre este órgano provincial del partido en la ciudad andaluza para transformarlo en toda una declaración de intenciones en la que no evitó reconocer las dificultades que está atravesando. Fue por eso por lo que no faltó la frase "en los momentos difíciles es necesario sentir que hay respaldo y apoyo", refiriéndose a los presentes, que abarrotaban el lugar de la celebración.

"No voy a defender mi candidatura en el Congreso ahora porque no tengo los apoyos suficientes y porque sería un fraude; pero sigo siendo candidato [a la Presidencia del Gobierno]", recalcó para repetir la que fue su argumento más sonado tras el encuentro con Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela.

Y fue más allá para advertir también a Sánchez de que si finalmente opta por pactar con la formación de Pablo Iglesias La Moncloa estará "a las órdenes de los radicales que quieren romper España y no aceptan el orden constitucional", por lo que destacó que el líder socialista gobernará "hipotecado y humillado", cuando lo que necesita el país, "por el contrario, es un presidente con dignidad", apostilló. Rajoy insistió en que el Gobierno que "busca desesperadamente Pedro Sánchez" -con Podemos, Izquierda Unida y el apoyo de los independentistas- "haría mucho daño a nuestro país". No obstante, Rajoy puntualizó que "no les dejaremos romper España, ni cambiar la Constitución, para lo que tampoco tendrán la mayoría suficiente".

Durante su intervención, el candidato de los populares se volvió a reivindicar repitiendo por activa y por pasiva que el PP es el partido que ha ganado las elecciones y que por lo tanto lo normal sería que se le facilitase la gobernabilidad. Además, Rajoy hizo balance echando también la vista atrás para recordar cómo se encontró su partido y su Gobierno el país cuando llegó a la Presidencia del Ejecutivo, enfatizando de nuevo su archiconocido diagnóstico sobre "la crisis más grave que ha pasado España en muchos años" y cómo ha conseguido mejorar la situación económicamente, para puntualizar que un gobierno del PSOE con "los radicales" supondría una vuelta atrás.

Por su parte, el presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, se preguntó durante su intervención en la Junta Directiva Provincial del PP cordobés dónde está la presidenta de la Junta, Susana Díaz, ante la "locura colectiva" del líder socialista, Pedro Sánchez, de "ceder" ante los "radicales". Moreno reprochó a la dirigente socialista que está "muy callada a pesar de ser muy locuaz", y la emplazó a que manifieste "de manera urgente" si "está dispuesta a ceder a los radicales" la vicepresidencia del Gobierno de España, la Justicia, la Economía y la Política Territorial.