El Gobierno defiende que Otegi cumpla íntegra su condena
El Ejecutivo acusa al PSOE de cambiar de opinión sobre Sortu. Aguirre insiste en sus críticas al Constitucional.
Madrid/El Gobierno defiende que el ex portavoz de Batasuna Arnaldo Otegi cumpla íntegramente su condena por el caso Bateragune y acusa de haber cambiado de posición sobre Sortu al socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, quien ha arremetido contra Esperanza Aguirre por "poner a caldo" al Tribunal Constitucional. La presidenta del Gobierno regional madrileño, Esperanza Aguirre, ha avivado la polémica desatada tras su reflexión sobre la conveniencia de "empezar a pensar" en convertir al Constitucional "en una sala del Supremo, al afirmar que no entiende por qué a Sortu "no le llaman ETA directamente".
En el PSOE, además de su secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, también la vicesecretaria general, Elena Valenciano, ha considerado "una barbaridad" que Aguirre "se dedique a sacudir" a los políticos "como si ella fuera la Virgen de Fátima" y ha añadido que el Tribunal Constitucional no puede ser bueno "cuando te da la razón y malo cuando te la quita". No ha tardado en replicar la presidenta del Gobierno regional madrileño, quien ha aconsejado a Valenciano que se entere "de lo que ocurre exactamente" en el Constitucional y de por qué emite una sentencia sobre Sortu que "se mete" en los ámbitos legislativo y ejecutivo, cuando eso "no es propio de un tribunal".
En nombre del Gobierno, su vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, ha subrayado que el PP no ha cambiado de posición sobre Sortu, a diferencia de, a su criterio, Rubalcaba, quien dijo que su legalización favorecerá la desaparición de ETA, objetivo "de todos los demócratas". En un comunicado, la Ejecutiva Federal del PSOE ha recordado a Sáenz de Santamaría que "lo que ha cambiado desde hace un año es que ETA ha declarado el fin de la violencia". La vicepresidenta del Ejecutivo se ha mostrado además a favor de que el ex portavoz de Batasuna cumpla íntegramente su condena, aunque ha precisado que deberán ser los tribunales los que decidan en su caso, y, en el mismo sentido, el presidente del PP en el País Vasco, Antonio Basagoiti, ha recalcado que "aquí lo que tiene que salir no es Otegi de la cárcel, sino armas de los zulos". Por el contrario, el coordinador general de IU, Cayo Lara, ha defendido la puesta en libertad del ex dirigente de Batasuna y ha emplazado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a desautorizar a Aguirre.
En San Sebastián, los portavoces de la antigua Batasuna Maribi Ugarteburu, en euskera, y Pernando Barrena, en castellano, han leído una declaración en la que la izquierda abertzale afirma que la Ley de Partidos "ha fracasado" porque no ha logrado "destruir" a este sector político, al tiempo que anima a toda su militancia a participar en el proceso constituyente de Sortu.
La legalización de Sortu por el Constitucional ha suscitado asimismo numerosas reacciones en el ámbito judicial, entre ellas la del fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, quien ha expresado su deseo de que esta decisión sirva para alejar a ETA y al mundo abertzale de la violencia terrorista. También el magistrado de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional José Ricardo de Prada ha considerado "muy adecuada" la resolución del Constitucional y ha confiado en que ese tribunal resuelva en el mismo sentido respecto al caso Bateragune.
Frente a la propuesta de Aguirre se ha manifestado la portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Gabriela Bravo, quien ha defendido la existencia del Constitucional porque "ha sido un órgano vital en estos 33 años" de democracia. También el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Miguel Ángel Gimeno, se ha expresado "absolutamente en contra" de la reflexión de la presidenta regional madrileña sobre la posible necesidad de suprimir el Constitucional, ya que se trata de "un órgano básico" del Estado. Desde Bilbao, el magistrado de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo Joaquín Giménez ha definido la sentencia del Constitucional como "un paso muy importante" para garantizar el pluralismo en Euskadi, si bien ha advertido de que "uno no se vuelve demócrata" en un día y ha justificado que el Constitucional vaya a vigilar la actividad de este partido de la izquierda abertzale.
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